OFELIA ECHAGÜE VERA (1904- 1987)
Al terminar la carrera de magisterio, estudió con Héctor Da ponte, Pablo Alborno y Modesto Delgado Rodas, del que fue única alumna, en Asunción. Gracias a una beca otorgada por el gobierno nacional viajó a Uruguay para ingresar a la Escuela Superior de Bellas Artes, donde tuvo como profesor al pintor Domingo Bazurro. Posteriormente se trasladó a Buenos Aires, teniendo como profesores a Alfredo Guido, Emilio Centurión, Juan Carlos Castagino en la Escuela Superior de Bellas Artes “Ernesto de la Cárcova”.
A su regreso al país, es ella quien introduce nuevos aires en las artes visuales del Paraguay, siendo se temática preferida la figura humana y dentro de ella el desnudo femenino, dejando de lado al paisaje y a la naturaleza muerta, temas que predominaban en la pintura femenina de la época, sus obras dejan ver un dibujo preciso y de contornos bien definidos; en cuanto al colorido es de registros neutros, austeros, con grises, pardos, que juntamente con la armonización de los tonos confieren una señal inconfundible a sus cuadros.
Además fue “Maestra” en el Ateneo Paraguayo y en la Escuela de Bellas Artes donde ejerció la cátedra de Dibujo Artístico durante más de 25 años desde su fundación en 1957. Indudablemente fue una artista impecable que la lleva a un primer lugar en nuestro medio artístico. Ella consideraba que la libertad es el fundamento del proceso de creación.
Fuente: EXPOSICIÓN HOMENAJE “RECORDANDO A OFELIA ECHAGÜE Y ADAN KUNOS” , Galería Agustín Barrios – Centro Cultural Paraguayo-Americano CCPA – Abril 2010.
ECHAGUE VERA, OFELIA (1904 a 1987)
Desde joven estudió pintura en Montevideo y Buenos Aires, donde egresó de la Escuela Superior de Arte Ernesto de la Cárcova.
Expuso por primera vez en Asunción en 1946 en un renombrado centro social, a falta de galerías. En Aquella ocasión, sus cuadros fueron retirados de las paredes, porque un grupo de señoras consideró ofensivas las pinturas de mujeres desnudas.-
Su obra, que estaba muy a la par de la actualidad pictórica, se basaba en esquemas constructivos de influencias cubistas que supone una fuerte voluntad formal
Ofelia Echagüe Vera en 1948 se hizo cargo del Taller de Pintura del Ateneo Paraguayo, que estaba a cargo de Jaime Bestard.-
Fuente: "DICCIONARIO DE LAS ARTES VISUALES DEL PARAGUAY", por LISANDRO CARDOZO, con los auspicios del FONDEC (FONDO NACIONAL DE LA CULTURA Y LAS ARTES), Asunción-Paraguay 2005.
ECHAGÜE VERA, OFELIA
Pintora y docente. Nació en Asunción en 1904. Comenzó estudiando en su ciudad natal con Héctor Da Ponte, Modesto Delgado Rodas, Pablo Alborno y Adán Kunos, y luego se trasladó becada a Montevideo (Uruguay) donde definió su formación con estudios realizados bajo la dirección del profesor Domingo Bazzurro (1939-1941) y de los profesores Alfredo Guido y Emilio Centurión, de Buenos Aires, donde se graduó en la celebérrima Escuela Superior de Bellas Artes de la Nación "Ernesto de la Cárcova", de la capital porteña.
Acerca de su creación señala Ticio Escobar en su exhaustivo y formidable tratado "Una interpretación de las artes visuales en el Paraguay": Su mejor obra creativa la realiza en el período inmediato a su vuelta al país y durante pocos años. En su exposición en el "Club Centenario", la primera individual, en 1946, ya están definidas las características fundamentales de su pintura: buena factura técnica, figuras rotundas de presencia escultórica, organización meditada del espacio en planos y volúmenes, fuerte sentido de la expresión y preferencia por el tema del desnudo femenino.
El desnudo es para ella "un problema pictórico de máxima jerarquía" que plantea siempre la cuestión de la organización y el equilibrio. Pero es indudable que estas preocupaciones formales no le llevan a descuidar la expresión de ciertos contenidos que, en muchas de sus obras, aparecen ligados a determinada problemática de tipo existencial.
Su buena técnica retratística, que el permite el manejo de la intensa expresividad del rostro, y la ubicación de figuras solitarias en modestas habitaciones vueltas casi sórdidas por la luz y la composición, dan un sentido general de cierta desolación, un sentimiento vago de angustia".
Y agrega: "La obra de Ofelia Echagüe, desarrollada básicamente en la década del '40, anuncia algunas de las cuestiones pictóricas fundamentales de la década siguiente... Su obra, fuertemente signada por la enseñanza de sus maestros porteños, especialmente Centurión, tiende a una organización plástica que subraya la construcción, pero esta insistencia en los aspectos formales no implica menoscabo de lo expresivo. Aunque sus macizos personajes se estructuran en composiciones cuidadosas y meditadas que delatan la influencia del posimpresionismo rioplatense, tienen una indudable carga de significados relativos a la problemática existencial del hombre; siempre hay un fondo de soledad y desesperanza en sus ambientes semivacios invadidos por luces crudas, un sentido de incomunicación instalado entre sus mujeres de cuerpos duros y miradas ausentes".
La aludida muestra de 1946 marca el punto de partida de una nueva etapa que cambia el papel de la mujer en las artes plásticas paraguayas.
De vuelta al país se dedica a la enseñanza, siendo célebres sus clases en el Ateneo Paraguayo, primero, y en la Escuela de Bellas Artes, después, por la solidez de los conceptos y el rigor con que supo guiar a los muchos creadores que pasa-ron por sus aulas, plenas de libertad y vuelo artístico.
Falleció en Asunción en 1987.
Fuente: FORJADORES DEL PARAGUAY – DICCIONARIO BIOGRÁFICO. Realización y producción gráfica: ARAMÍ GRUPO EMPRESARIAL. Coordinación General: Ricardo Servín Gauto. Dirección de la obra: Oscar del Carmen Quevedo. Tel.: 595-21 373.594 – correo: arami@rieder.net.py– Asunción-Paraguay 2001 (716 páginas).