PEQUEÑA ENCICLOPEDIA DE
HISTORIAS MINÚSCULAS DEL PARAGUAY – TOMO 2
Por LUIS VERÓN
© Luis Verón
Prólogo: Gustavo Laterza Rivarola
Diseño de tapa: Surucu’a
Dibujo de tapa: Carlos Sosa
Asunción - Paraguay
PROLOGO: Las historias minúsculas que se recogen en esta enciclopedia -que tienen a sumarse a las del primer tomo, editado dos años atrás - conforman un mosaico formativo e informativo dirigido al lector medio. Lector medio, hoy en día, es una persona que transita a saltos del periódico a la revista e incursiona ocasionalmente en el libro, cuando la ansiedad del tráfago y los apremios del consumo le dan respiro. A veces su interés por el país, su ciudad o su comunidad, es lo suficientemente intenso como para despertar la curiosidad por el pasado; pero entonces el lector medio no tiene por propósito investigar, preparar una conferencia o consolidar una biblioteca; desea apenas enterarse y quizás poder transmitir a sus sucesores, fortaleciendo el sentido de pertenencia y el deseo de perpetuación en la memoria del sitio y de las generaciones, única vía hacia la inmortalidad que está a su alcance.
La mayoría de los paraguayos somos lectores medios en un país de baja productividad editorial, de ahí que nuestro alimento intelectual deba ser importado del extranjero, principalmente de la Argentina, al igual que las papas y las cebollas, los quesos y los salames. Esta dependencia alienante, forzada por las circunstancias, sólo podría ser exitosamente compensada y superada con la intensificación de la productividad cultural local, tarea en la que tiene la máxima prioridad la recuperación del pasado nacional, a condición -claro está- de no recaer en los excesos del nacionalismo. El culto nacionalista de la historia ha mostrado su completa ineptitud para ser ciencia y para formar conciencia. Lo que hay por hacer es una nueva manera de comenzar a recordar qué cosa somos los paraguayos, retrato que ha de pintarse sin recurrir a los modelos de la galería heroica.
Es decir, precisamente nos está faltando una historia minúscula; nos está faltando planear por debajo de los cúmulos de gloria y grandeza, de cúspides y excelsitudes. El hombre común tiene su pasado y lo querría ver reproducido por la pluma de sus intelectuales. El lector medio querría verse al fin protagonista, siquiera por una vez, como habitué de un bar memorable, como transeúnte de una vereda entrañable, como pasajero de un tranvía que ya no circula.
Y esta es la cuota por la que ha aceptado responder Luis Verón. Su “Pequeña Enciclopedia”; desde la óptica práctica, sustituye con éxito a los fragmentados recuerdos de los protagonistas aún vivos de aquellas historias, así como al disperso e inoperable archivo de datos que se acumula en diarios y revistas. Sin embargo, va aún mucho más allá de la mera clasificación de información para aligerar la tarea investigativa de otros mineros de archivos herméticos. Llegará seguramente a dar satisfacción a los apetitos intelectuales y emotivos de este hombre común hacia quien dirige su oferta, después de que de estos recibiera la indicación de lo que es ignorado o está olvidado y merece ser reimpreso en las conciencias de las generaciones.
Se requiere esta clase de tareas en nuestro país, pues, por muchas razones y para múltiples finalidades, de las cuales ninguna de las citadas es la menos apreciable. Luis Verón la asume con tenacidad esmerada y diligencia suficiente.
GUSTAVO LATERZA RIVAROLA
ÍNDICE CAPITULAR:
Dedicatoria, Prefacio
FACIO/
LUGARES/
PERSONAJES/
EL MATE/
SUCEDIDOS/
IGLESIAS Y AFINES/
INDIGENISMO/
COSTUMBRES/
CURIOSIDADES/
EL TRANVÍA/
OTRAS MINUCIAS.
BIBLIOGRAFÍA/
ÍNDICE GENERAL
POSFACIO: Así como hay situaciones que nos vuelven a los días de la infancia, también hay lecturas que tienen la virtud de tocar nuestras fibras más secretas, aquellas que yacen enterradas en las profundidades del inconsciente.
Resultaba imprescindible la escritura o compilación de artículos como los contenidos en el libro de Luis Verón. Su lectura proporciona un placer extraño, que es el de revivir en la memoria formas, hechos y situaciones del pasado que de otro modo se hubieran perdido para siempre, incluso para quienes en alguna medida hemos tenido oportunidad de participar de ellos.
El acierto de Verón consiste en haber recortado de nuestra historia pequeños trozos significativos, todos debidamente documentados, de modo que es posible diseñar con ellos los contornos anteriores -el alma- de nuestra asendereada vida colectiva: En suma, se trata de un libro recomendable para aquellos lectores que quieren sumergirse de nuevo en un pasado casi mítico, hoy a punto de desaparecer bajo los arrestos de la modernidad.
EDGAR VALDEZ
ENLACE INTERNO AL LIBRO
"PEQUEÑA ENCICLOPEDIA DE HISTORIAS MINÚSCULAS DE PARAGUAY" - TOMO I
Por LUIS VERÓN
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