Presidencia Provisional de LIBERATO MARCIAL ROJAS.
5 de julio de 1911 al 28 de febrero de 1912.
A don Liberato Marcial Rojas Cabral le tocó ejercer la presidencia de la República
en un periodo tumultuoso de nuestra historia: entre el 5 de julio de 1911
al 28 de febrero de 1912 (provisional), aunque con un breve interregno
en el que asumió un triunvirato de efímera duración. (Luis Verón)
Biografía del Presidente Rojas.
Nació el 17 de agosto de 1870. Adquirió una sólida cultura en el Colegio Nacional y la Universidad de Asunción. Fue agrimensor e igualmente dedicó sus afanes al periodismo, fundando "El Pueblo" a fin del siglo pasado, y en "El Tiempo" fue uno de los redactores. Escritor castizo e inspirado poeta, legó varias composiciones en castellano y guaraní.
Dirigió el semanario "La Aurora", de selecto material de lectura.
Le cupo ser uno de los fundadores del Centro Democrático (10-VII-87), llamado luego Partido Liberal.
En el Parlamento se revela como un orador elocuente, siendo diputado y senador, llegando a desempeñar la presidencia de ambas cámaras. Actuó en la guerra civil de 1904, en filas de los insurgentes, que triunfaron.
El 5 de julio de 1911 asume la PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA, y cronológicamente fue el 20° Presidente, desde 1870.
Residía en la casa de la calle México Nº 1. Contrajo nupcias con doña Susana DOLORES SILVA, formando un respetable hogar, en cuyo seno vieron la luz varios caracterizados exponentes de la sociedad paraguaya, entre ellos el Teniente ADOLFO ROJAS SILVA, primer mártir de la defensa del Chaco, inmolado por los bolivianos en pleno territorio paraguayo el 25 de febrero de 1927, en plena época de paz.
Liberato Marcial Rojas falleció en Montevideo el 22 de agosto de 1922.
AL ASUMIR EN 1911, INTEGRÓ ASÍ SU GABINETE:
INTERIOR: Dr. Alejandro Audibert; RELACIONES EXTERIORES: Dr. Teodosio González; HACIENDA: Dr. Francisco L. Bareiro; JUSTICIA, CULTO E INSTRUCCIÓN PÚBLICA: Dr. Federico Codas; GUERRA Y MARINA: Tte. Cnel. Américo Benítez.
El Presidente Rojas adquirió el palacio Patri (actual local de Correos y Telégrafos) para residencia presidencial, por 60.000 pesos oro. Residió allí un tiempo.
Con el nombramiento de Rojas no se despeja el panorama político. Al contrario, surgen nuevas complicaciones. Integraban su gobierno RADICALES JARISTAS (no obstante la deportación de Jara) y un colorado, el, Dr. FEDERICO CODAS.
El diputado RICARDO BRUGADA, asesor privado del Presidente, era un colorado fervoroso y entusiasta. También otras funciones eran desempeñadas por caracterizados miembros de dicha entidad política. Como se ve, una amalgama heterogénea de hombres de diversas tendencias, antagónicas e irreconciliables.
Por su parte, los RADICALES GONDRISTAS comienzan a conspirar activamente, preparando el "coup d'état" de turno.
El Mayor TOMÁS MENDOZA y el ex Ministro CIPRIANO IBÁÑEZ son enviados a Europa y al Pacífico, respectivamente, en misiones oficiales, para alejarlos del país.
Por ley del 26 de setiembre de 1911 se otorga concesión para construir una vía férrea (Noreste Paraguayo), pasando por Curuguaty, Saltos del Guairá, hasta la cordillera del Amambay y conectaría con la brasilera. Proyecto que no se llevó a cabo, como otros tantos.
Diversas conspiraciones se traman. Rojas ofrece a los gondristas carteras en el gabinete, pero EDUARDO SCHAERER, líder del momento, rechaza toda oferta que no representase la entrega total del poder. Se declara el estado de sitio.
No obstante, se dicta una ley de amnistía para que regresen los exiliados. La situación política se complica ostensiblemente. Existían: los RADICALES GONDRISTAS; los radicales que colaboraban con el gobierno; lo liberales democráticos, grupo constituido en 1910 y que tuvo escasa actuación, en el cual militaban antiguos cívicos. En otros términos, el partido Liberal se disgregaba.
Se constituye en Buenos Aires un comité revolucionario compuesto por MANUEL GONDRA, Dr. JOSÉ P. MONTERO, EDUARDO SCHAERER. La financiación del movimiento estaría a cargo del portugués MANUEL RODRÍGUEZ, hombre de empresa de mucha visión, que había sido administrador del ferrocarril. El mismo facilita 300.000 pesos oro.
Este aporte lo hizo olvidando un entredicho que tuviera anteriormente con EDUARDO SCHAERER y con el certero presentimiento de que los radicales gondristas recuperarían el poder. Se formaliza la operación y la financiación de la próxima campaña subversiva está asegurada.
El Presidente Rojas se desenvuelve precariamente por la orfandad de hombres representativos con que contaba. Busca unirse con los liberales democráticos.
A este efecto, nombra al Dr. Carlos L. Isasi Ministro de Relaciones Exteriores, reemplazando al Dr. Teodosio González.
Los radicales inician una virulenta campaña periodística por "El Diario". Por fin, el Presidente se decide a actuar con energía y comienza la deportación en masa. El litoral argentino se colma de nuevo de refugiados.
Por ley del 2 de octubre de 1911 se prorroga el mandato del Presidente Rojas hasta el fin de 11º período constitucional, o sea, hasta 1914. Adquirido por los revolucionarios, llega el 22 de noviembre del 11 al Río de la Plata el "Constitución", un enorme barco de ultramar que nada tenía que ver con su homónimo "Constitución" (ex “Villarrica") de 1904. Los rebeldes contaban con 20 cañones y 14 ametralladoras, y sus barcos con instalación radiotelegráfica.
Pilar fue elegida sede del gobierno rebelde y el 23 de noviembre fue ocupada esta ciudad, así como también Humaitá. En Pilar se constituye una junta revolucionaria compuesta por Manuel Gondra, Dr. Manuel Franco, Emiliano González Navero, Dr. José P. Montero y Eduardo Schaerer, y lanzan una proclama justificativa del movimiento.
El gobierno estrecha filas con los liberales democráticos en esta emergencia y se dispone a adoptar medidas, con una contraexpedición naval. El pacto del gobierno con los liberales democráticos (cívicos) es precario y queda sin efecto. En consecuencia, renuncia el canciller Isasi. En cambio, aumenta la influencia del partido Colorado, merced a la incansable labor de Ricardo Brugada y el ministro Federico Codas.
Rojas se decide a buscar la colaboración de la Asociación Nacional Republicana para luchar contra los rebeldes radicales. Es nombrado canciller el Dr. Antolín Irala, renombrado jurisconsulto y el conocido médico Dr. Eduardo López Moreira es designado Ministro de Justicia, C. e I. P. en reemplazo del Dr. Codas, enviado a Buenos Aires en misión reservada.
Los radicales organizan montoneras en todo el país y cuentan con nuevos adherentes entre los civiles y en el seno del ejército.
Los colorados, comprometidos con el gobierno, comienzan a reclutar gente entre sus correligionarios. Rojas entrega el mando de varias unidades a liberales situacionistas; no obstante, algunas son comandadas por colora dos, como los Mayores Eugenio A. Garay, Justo A. Pane, Bartolomé López, González Filisbert, Capitán Bonifacio Caballero (hijo del Gral. Caballero), Tomás Romero Pereira, etc.
Pero el comando superior gubernista estaba confiado a jaristas, como el propio Ministro de Guerra Cnel. A. Benítez, José D. Sosa, Enrique Oliver, Timoteo Aguirre, José Valenzuela, etc.
Una división de 1.500 hombres al mando del mayor José D. Sosa, es enviada hacia Encarnación, con instrucción de batir a los rebeldes. Ocurre otra novedad: el cañonero "Triunfo" se pasa a los insurgentes, lo que decapita la flota gubernista, que pierde a su mejor nave. El alemán que lo comandaba fue asesinado.
Ya comenzaban las montoneras a convulsionar la campaña. En Pilar se organizaban los insurrectos bajo la dirección del Cnel. PATRICIO ALEJANDRINO ESCOBAR, los Comandantes Adolfo Chirife, Pedro Mendoza, Manuel Rojas A., Manlio Schenoni L. y otros. Entretanto, los gubernistas se habían fortificado en Barranco Mercedes, al sur de Villeta, al mando de Garay y Valenzuela. La Argentina envía barcos para garantizar los intereses de sus compatriotas, lo que motiva después un entredicho entre el gobierno de Rojas y el presidente ROQUE SÁENZ PEÑA, que culmina con la ruptura de relaciones. El canciller Antolín Irala protesta airadamente, denunciando que barcos argentinos albergaban a desertores del servicio militar y favoreciendo abiertamente a los rebeldes. A su vez, el ministro argentino Martínez Campos acusa al gobierno por atropellos contra establecimientos argentinos en el Chaco, amenazando con la intervención de su flota de guerra.
Un tiempo después, el canciller Irala protesta porque en el barco paquete "Lambaré" fueron trasportadas las derrotadas tropas radicales.
En este conflicto el ilustre Antolín Irala hizo gala de su versación en derecho internacional. Nada menos que 25 notas fueron intercambiadas. Mientras, el gobierno efectúa una emisión de 30.000.000.- pesos, de cuya suma fue entregada al señor Emiliano Rojas, 500.000.- pesos oro para adquisición de material bélico en Buenos Aires.
Por ley del 12-I-1912, se crea la Junta Fiscalizadora, que se encargaría de todo lo atinente a la emisión de billetes. Hasta la fecha no se había producido ningún choque armado entre gubernistas y rebeldes. Sólo preparativos y aprestos bélicos. Así estaban las cosas, cuando el 14 de enero de 1912 se produce un golpe en la policía, coadyuvando con la revolución de los LIBERALES GONDRISTAS, contando con la colaboración de varios elementos adictos en dicha repartición, entre ellos el secretario HÉCTOR SALAVERRY.
El Teniente Coronel ALFREDO APONTE, militar retirado; MARIO USHER, ex jefe de policía del Presidente Gondra y MARCOS CABALLERO CODAS, comerciante también, ex jefe de policía e hijo del Gral. Bernardino Caballero, fueron los hombres del momento. Se sublevan las fuerzas policiales y la guardia cárcel y amanece el 15 de enero de 1912 con la ciudad en poder de los complotados. El PRESIDENTE ROJAS, apresado y obligado a renunciar, viaja al exterior.
EL TRIUNVIRATO. Un gobierno tripartito se constituye, integrado por APONTE, USHER y CABALLERO CODAS, que tuvo la efímera duración de las estrellas fugaces: del 14 al 17 de enero de 1912.
Forzando el paso de Barranco Mercedes, los rebeldes llegan a la capital a bordo del "Adolfo Riquelme" y con ellos el jefe, MANUEL GONDRA, y ocupan Asunción.
Simultáneamente, los colorados se reúnen secretamente en la quinta Caballero, residencia del viejo y glorioso Gral. Caballero, entre ellos el MAYOR VALENZUELA y el Capitán PONCE DE LEÓN. Resuelven atacar con las fuerzas disponibles y reconquistar Asunción. Los radicales se preparan para la defensa y organizan cantones en la ciudad. La plaza Uruguaya, la estación y Sansón-cué (Manuel Domínguez y Paraguarí), eran los reductos radicales. El 16 y 17 de enero, se producen violentos ataques; se lucha en las calles con saldo de numerosas bajas. El Comandante Aponte, triunviro, recibe una grave herida en la pierna y cae prisionero. Ante tan impetuoso ataque los radicales se retiran a sus barcos y abandonan la capital. Esta acción revela la poca enjundia de los radicales gondristas, que contando con poderosas fuerzas y elementos bélicos, claudican inexplicablemente. Se dirigen hacia el norte con el objeto de ocupar Concepción y zonas aledañas. Otro grupo se dirige a Humaitá en el barco "Lambaré". En el interregno, el diputado RICARDO BRUGADA se atribuye la potestad y nombró al Dr. CAYO ROMERO PEREIRA, jefe de policía de Asunción.
En estas circunstancias, el depuesto Presidente Rojas regresa a reasumir sus funciones. Caso único en nuestra historia.
Renuncia el ministro del Interior, Dr. Audibert y lo reemplaza Daniel Codas. El Partido Colorado dominaba la situación política
El mayor Valenzuela, héroe de la jornada del 17 de enero, cae en desgracia y es apresado.
En esto, ocurre en el sur algo insólito. Las fuerzas revolucionarias gondristas, comandadas por Escobar y Chirife, son derrotadas por una fuerte columna al mando de los mayores Sosa y Oliver. Aquellas estaban atrincheradas en Humaitá. Tras cruenta lucha, son desalojadas y se refugian en los barcos surtos en dicha localidad. Créase o no, el Cnel. Jara, proscrito, volvía de nuevo a las andadas organizando un fuerte destacamento con el que se proponía luchar contra los revolucionarios gondristas y contra el gobierno de Rojas, por cuerda separada. Los liberales democráticos (cívicos), también le apoyarían. El Dr. Isasi y otros, coadyuvan para este objeto. El panorama político se ensombrese y se complica más aún.
En otro orden de cosas, el General de División Bernardino Caballero, héroe de la guerra, ex Presidente de la República y fundador de la Asociación Nacional Republicana, fallece el 26 de febrero de 1912 a la edad de 73 años. Su desaparición conmovió profundamente al pueblo paraguayo todo y se le rinde diversos homenajes póstumos.
En medio de aquella caótica situación, el Partido Colorado da un golpe decisivo para afianzarse del todo en el poder. Se apoderan de las posiciones de los radicales en Barranco Mercedes, que quedan al mando de Eugenio A. Garay (colorado). El gestor del "coup d'état" es el Dr. Cayo Romero Pereira, jefe de policía. El Cap. Bonifacio Caballero, también coadyuvó eficazmente. Los oficiales liberales adictos al Presidente Rojas son invitados a tomar una copa de champagne en la policía y, una vez en dicho local, apresados incontinenti.
El Presidente LIBERATO M. ROJAS fue detenido por su propia guardia, el 27 de febrero de 1912 y el día siguiente renuncia de nuevo. Sin solución de continuidad, sigue la puja por el poder. El país seguía convulsionado y la guerra civil continuaría más encarnizada que nunca.
Convocado el Congreso, designa Presidente Provisional al Dr. PEDRO P. PEÑA. Era un gobierno netamente colorado. Esta época fue una de las más anárquicas de la historia. Aparte del precario gobierno de Asunción, existía la Junta Radical de Pilar y otra con asiento en Humaitá, constituida por una coalición de jaristas y cívicos, liderada por el Cnel. Jara, ahora proscrito. Radicales y jaristas, ambos en plena campaña subversiva.
Fuente: HISTORIA DEL PARAGUAY CONTEMPORANEO 1869 - 1983. Autor: OSVALDO KALLSEN, Imprenta Modelo S.A., Asunción – Paraguay 1983 (215 páginas).
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