PortalGuarani.com
Inicio El Portal El Paraguay Contáctos Seguinos: Facebook - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani
PRINCESA AQUINO AUGSTEN (+)
  EL CAMINO INVERSO - Ensayo de PRINCESA AQUINO - Junio 2013


EL CAMINO INVERSO - Ensayo de PRINCESA AQUINO - Junio 2013

EL CAMINO INVERSO

(FRAGMENTO DE OBRA)


Ensayo de PRINCESA AQUINO


"No entiendo porque me encuentro aqu铆, pero veo que estoy desnudo. La sensaci贸n me turba y no me atrevo a mirar a mis compa帽eros que desnudos como yo son exhibidos como animales. No nos dejan siquiera cubrirnos con las manos los genitales, expuestos como el resto de mi cuerpo. La desdicha me invade, es una desesperaci贸n -obsesi贸n. No quiero que me vean as铆. Ninguno de nosotros quiere. Nos rasuraron bigotes y barbas. Nos han cortado el cabello de la manera extra帽a que lo llevan ellos. La cabeza rapada desde la frente hasta el centro de la misma dej谩ndonos una frente inmensa, inacabable. Mis compa帽eros se acurrucan en el suelo sobre s铆 mismos, se niegan a que les miremos esos rostros desconocidos que antes estaban cubiertos de abundante pelo. Y sobre todo sienten la humillaci贸n de sus verg眉enzas expuestas. A la desesperaci贸n inicial le sigui贸 una tremenda melancol铆a. Algunos permanecen acaracolados, inm贸viles en un rinc贸n, como gusanos vueltos sobre s铆 mismos. Sin moverse, sin comer. La desesperaci贸n de verlos as铆 me produce un incontenible llanto. Nos hemos vuelto indios, ya no somos nosotros. 隆Ahora somos ellos, ya no somos nosotros! Intento entonces decir una plegaria, rezar, suplicar a Dios, que me ayude, pero me impiden hacerlo, dicen que es una blasfemia. Que el m铆o no es El Dios verdadero. Me imponen que renuncie a ellos. Que acepte su Dios como el 脷nico Verdadero. El sudor me resbala por el rostro y creo estar enfermo. Si enfermo es la palabra. 鈥

Hasta que la angustia crece de tal modo que llega a despertarme. Porque fue as铆. 隆Gracias a Dios, fue as铆, fue un sue帽o! Y me sorprendo pensando y entrando nuevamente en esa pesadilla, que me impone esa reflexi贸n que me niego a hacer. La reflexi贸n sobre nuestros actos. O lo que es lo mismo por la falta de actos. Esa omisi贸n que tanto pesa. 驴Qui茅n ser谩 el que les devuelva el sue帽o tranquilo? 驴Qui茅n podr谩 retrotraerles a su sue帽o original el de antes?


LA ANTIGUA GALAGANIT

Los Ntok贸it habitaban estas tierras cuyos caciques Takaid铆 y Le贸n, la llamaban en su idioma 鈥淕ualaganit鈥. Estas personas usaban la decalvaci贸n de la parte delantera del cuero cabelludo, por lo que los guaran铆es, su vecinos los llamaban 鈥淭ov谩鈥 que significa rostro, frente. Ellos se llamaban a s铆 mismos qom, hombre, por lo que los siguieron llamando luego toba qom -seg煤n los antiguos-

El territorio conocido hoy como CLORINDA, estaba habitado por nativos de la etnia Qom, entendiendo por etnia, el termino proveniente del vocablo griego que significa 鈥減ueblo鈥, comunidad humana con afinidades culturales, ling眉铆sticas o raciales. Seg煤n nos cuenta el

Se帽or Fern谩ndez Cancio en sus memorias, que empiezan as铆:

鈥淓l Gobierno Argentino hizo concesiones de tierras fiscales en su jurisdicci贸n territorial, al sur-oeste del r铆o Pilcomayo. Yo estaba radicado en Asunci贸n del Paraguay. Una familia h煤ngara que viv铆a en Buenos Aires las obtuvo en propiedad para colonizarlas. Tom茅 en arrendamiento treinta y dos (32) leguas de esas concesiones, y cuarenta (40) m谩s, despu茅s, de propiedad privada de los Se帽ores Mones Caz贸n y Dura帽ona, estas 煤ltimas hab铆an pertenecido a Madame Lynch, la gran compa帽era del Presidente del Paraguay, Mariscal Solano L贸pez. 鈥

Las tierras colonizadas por Don Fern谩ndez Cancio, estaban habitadas por los hoy llamados 鈥淭obas鈥. Las mismas fueron confiscadas por los estados; cedidas algunas veces, vendidas otras por los Gobiernos paraguayos y argentinos. La primera mensura la realiz贸 con los pobladores, el Dr. Gaspar Rodr铆guez de Francia. Luego de la Guerra de la Triple Alianza o 鈥淕uerra Grande鈥, encontramos nuevos pobladores, a impulso de las concesiones de tierras anunciadas por el Gobierno Argentino. Lo cierto es que solo 112 fueron los grandes beneficiarios de las cinco millones de hect谩reas del Gran Chaco. Uno de estos fue el Sr. Benjam铆n Zapiola, quien transfiri贸 las tierras recibidas en concesi贸n a la Sociedad Ruggero Bossi y Cia.

Sigue narrando el Se帽or Fern谩ndez Cancio, que naci贸 en Taramundi, Provincia de Oviedo, colindante con Galicia, de padres gallegos. Su madre era maestra en Cangas de Tineo.

鈥淔und茅 este Pueblo hoy Ciudad, el 12 de Julio de 1892, entonces habitado por indios, cuyo paraje se llamaba, en idioma nativo, Gualaganit, nombre de un 谩rbol, a orillas del R铆o Pilcomayo, frente a la capital del Paraguay Asunci贸n y lo pobl茅. Lleva el nombre de CLORINDA, en recuerdo de la esposa del terrateniente H煤ngaro de Buenos Aires 鈥.

Entre 1867 y 1918, el Imperio Austroh煤ngaro reuni贸 a una docena de nacionalidades, en territorios que hoy abarcan Austria, Hungr铆a, Rumania, parte de Italia, etc. Fue el se帽or Ruggero Bossi, el terrateniente h煤ngaro a quien el se帽or Jos茅 Fern谩ndez Cancio arrend贸 parte de sus tierras, y le dio el nombre a la Ciudad, por la se帽ora Clorinda Pietranera de Bossi. Esposa del due帽o de la Compa帽铆a Ruggero Bossi, que m谩s tarde las vendi贸, al se帽or Juan Manuel Mara帽a. Este a su vez por escritura P煤blica estableci贸 que 80.000 hect谩reas hab铆an sido adquiridas por el se帽or Manfredi Hertelendy, menos las 煤ltimas que fueron saldadas por su viuda Se帽ora Elvira Mara帽a de Hertelendy

Los sucesivos Gobiernos Argentinos promulgaron leyes relativas a la Colonizaci贸n, dando preferencia a los extranjeros europeos, una de ellas fue la Ley 817, Art. 104, del Presidente Avellaneda, cuyo cargo ocup贸 desde 1874 hasta 1880.

鈥渃onced铆a parcelas de 80.000 hect谩reas condicionadas para la colonizaci贸n y la instalaci贸n deferente de los extranjeros europeos imponiendo como m铆nimo la instalaci贸n de 250 familias con los terrenos mensurados y con infraestructura m铆nima para que funden las colonias y ejerciten unas administraci贸n y control de gesti贸n llevada a cabo por la oficina de tierras y colonizaci贸n. 鈥

La Ley Nacional 2.875, promulgada por el Presidente Pellegrini en 1891, trat贸 de regularizar las concesiones ya que las mismas en su mayor铆a no cumpl铆an con lo establecido.

Hasta que finalmente en l899 el Gobierno Nacional adjudico estas tierras, d谩ndoles los t铆tulos de propiedad.

All铆 donde muere la muerte principia todo.

La batalla es cruenta, se enfrentan los enemigos, ambos cubiertos por sus armaduras, s贸lo alcanzan a verse los ojos. No se conocen, pero saben que deben matarse uno al otro, quiz谩s ya no importe el porqu茅.


-鈥淎migo, me has vencido y te perdono....

Perd贸name t煤 tambi茅n, no al cuerpo, que nada teme,

Sino al alma, por ella ruega
Y dame el bautismo que lave todas mis culpas.

-El empuja la punta del hierro en el bello seno,

que all铆 se hunde y su sangre 谩vido bebe,

y la malla, que con oro suave los pechos cubr铆a,

tierna y ligera, se inunda en un caliente r铆o.


-Ella se siente ya morir, y el pie le falla,

d茅bil y sin fuerzas,

-Te ruego, si en las armas hay lugar para ruegos,

Que tu nombre y tu estado me reveles,

Para que yo sepa, vencido o vencedor,

Quien honra mi muerte o mi victoria.

-Ella al caer, con voz afligida

Dice sus 煤ltimas palabras....


CLORINDA.

All铆 donde muere la muerte principia todo -


Tancredo se desespera tratando de salvar al enemigo que venci贸, sin saber que era una mujer, pero Clorinda ya no est谩 en ese cuerpo.


Torcuato Tasso-鈥淟a Jerusal茅n liberada鈥'鈥


EL SUE脩O RECURRENTE

鈥淟a copiosa lluvia rosada se hab铆a anticipado este a帽o. Por alguna raz贸n los p茅talos de las flores de lapachos no dejaban de flotar y tenderse en cuanta superficie aceptara recibirlos. No s贸lo el suelo estaba alfombrado de p茅talos rosa aquel agosto, hab铆an cubierto todo lo que encontraban a su paso, y m谩s de una testa incauta llevaba sin querer una corona de primavera como aura.

Definitivamente era un d铆a hermoso. La ni帽a se tendi贸 de cara al cielo sobre los p茅talos del suelo y sobre ella siguieron lloviendo p茅talos. Extendi贸 las manos y comenz贸 a cubrirse todo el vestido con ellos, luego comenz贸 a cubrirse el rostro, estaba en ello, cuando oy贸 que la llamaban. 鈥


TAMBI脡N ERA AGOSTO EN EL MONTE

Recuerdo el primer d铆a aquel en que nos conocimos... Hab铆a llorado sin pausa bajo el hermoso 谩rbol, su tronco era esbelto y me apoyaba en 茅l, lo abrazaba mientras mis l谩grimas mojaban esa peque帽a hendidura, vestigio del extinto panal. Pensaba que ya nadie fecundar铆a mi vientre al verme ahora, con la piel calcinada, agotada. Al final me dorm铆 y creo haber so帽ado, no lo s茅, que aquel 谩rbol mutaba en hombre y me abrazaba.

So帽茅 que me dec铆a -Te voy a hacer un mestizo -o no so帽aba. Mientras lo o铆a todo mi ser se estremeci贸 y sent铆 una felicidad infinita. El mito del 谩rbol de miel, de los Chamacocos, se hab铆a materializado en mi cuerpo. Durante el sue帽o me llev贸 por los caminos recorridos por Guido Boggiani, explorador, fot贸grafo, pintor, asesinado por los chamacocos, seg煤n algunos, ajusticiado por los Ishires, seg煤n otros. Quiz谩s a mano de un nativo de nombre Luciano, nombre ya colonizado. 鈥淓l cr谩neo estaba hundido del lado izquierdo y presentaba un boquete, el resto de los huesos estaban desparramados por el suelo, las fieras y rapi帽as hab铆an despedazado el cad谩ver. Tambi茅n estaban los restos humanos de Gavil谩n, su ayudante, junto a varios objetos que le pertenecieron. En el mismo lugar exist铆an restos de una gran tolder铆a. 鈥淟o cierto es que muri贸 en el Chaco Paraguayo, y sus restos fueron rescatados por el mismo Fern谩ndez Cancio, que fundara Clorinda, quien se ocup贸 de dar los m谩s m铆nimos detalles, sobre el asunto. Me negu茅 a creer su relato, pero cuando vi en aquella casa el cuadro llamado 鈥淩inc贸n de las Ruinas del Foro Romano鈥 premiado en la exposici贸n de Bellas Artes de Mil谩n, que el Capit谩n Boggiani del ej茅rcito italiano le entreg贸 al Sr. Fern谩ndez Cancio como agradecimiento de la familia del pintor muerto, seg煤n el mismo manifestara, todo estuvo claro.

Y sin m谩s me recito el poema de Gabriele D'Annunzio sobre Guido Boggiani XV, 343-353


鈥淭ra fosche incognite stirpi

Dell'anima ancora constretta

Nell 'inviluppo terrestre

come gli iddii primitivi

Dell '茅lade eran ancor misti

Agli elementi del cosmo 鈥


No s茅 c贸mo, pero cre铆 entender todo lo que dec铆a. Cuando despert茅 toda la angustia que me hab铆a aprisionado hab铆a desaparecido. Me sent铆a aliviada y hasta los rastros de las llamas me eran indiferentes. Como de costumbre Cronos sigui贸 devorando a sus hijos, y mientras yo esperaba mi tumo, reinici茅 mis tareas habituales. Mis d铆as volvieron a estar saturados de actividades que no me dejaban un s贸lo instante libre para la nostalgia. El traj铆n del trabajo, la gente nueva que conoc铆a permanentemente, las muestras de pintura, de arte ind铆gena, y todo lo relacionado con nuestra cultura.

Pero de todas las exposiciones de fotograf铆a ninguna impact贸 tanto como aquella en la que Teresa, mi querida amiga, reconoci贸 a su abuelo en una de las fotograf铆as tomadas por los muchos fot贸grafos antiguos, los primeros que llegaron por aqu铆, entre ellos el famoso pintor Guido Boggiani.

La foto era terrible, pero la historia que hab铆a detr谩s era a煤n m谩s dolorosa. Junto al Abuelo de Teresa, estaban unos hombres vestidos como cazadores, como en un safari africano, con armas, botas, sombreros. Eran cazadores de hombres. El anciano desnudo a la usanza de ese tiempo de vida silvestre y feliz. En el para铆so camuflado que termin贸 por ser descubierto por los reci茅n llegados. El abuelo de Teresa cubierto de pinturas corporales, que no s贸lo lo vest铆an, sino que tambi茅n lo proteg铆an contra los insectos del monte. Y el viejo sue帽o de EL CAMINO INVERSO, retorn贸 n铆tido a mi mente.



BIBLIOGRAFIA CORRESPONDIENTE A EL CAMINO INVERSO DE PRINCESA AQUINO, PAG. 73

鈥淏oggiani y el canto de D 鈥橝mmnzio en Laudi 鈥 Viriato D铆az P茅rez Revista Paraguaya. Asunci贸n. A帽o II N潞 34 pag. 115-126

鈥淓l Episodio de Boggiani en el poema de D鈥橝nunnzio鈥 Ib铆d., p谩g. 129-136

鈥淐oronario de Guido Boggiani鈥.

Palma de Mallorca 1.977. P谩g. 37, 55, 56, 74 (N.de A.)

Memorias de Don Jos茅 Fern谩ndez Cancio

Odisea de un Asturiano en los Chacos. J. Rodr铆guez Rebollar. 1955


INTERNET:

La Jerusal茅n Liberada. Torcuato Tasso

Fragmento de 鈥淟audi del cielo, del mare, de la terre, e degli Eroi鈥. Gabriele D鈥橝nunnzio-

鈥淎 Guido Boggiani- Revista del Instituto Paraguayo. Asunci贸n A帽o V. N潞 44 pag. 90 -96. 1903 www. Formosa Web- Historia de Clorinda

www.viajoporargentina

Formaci贸n de la Familia Paraguaya - Vol. Los Inmigrantes.

Margarita Dur谩n Estrag贸- Mart铆n Romano Garc铆a.



ENLACE INTERNO A DOCUMENTO FUENTE

(Hacer click sobre la imagen)

REVISTA DEL PEN CLUB DEL PARAGUAY

IV 脡POCA 鈥 N掳 24 JUNIO 2013

Editorial SERVILIBRO

Asunci贸n 鈥 Paraguay. Junio 2013 (150 p谩ginas)


ENLACE INTERNO A ESPACIO DE VISITA RECOMENDADA

PEN CLUB DEL PARAGUAY en PORTALGUARANI.COM


(Hacer click sobre la imagen)





Bibliotecas Virtuales donde se incluyó el Documento:
LIBROS,
LIBROS, ENSAYOS y ANTOLOG脥AS DE LITERATURA P






Buscador PortalGuarani.com de Artistas y Autores Paraguayos

 

 

Portal Guarani © 2025
Somos la mayor Base de Datos Cultural, Art铆stica y Hist贸rica del Paraguay
Todos los derechos reservados
Asunción - Paraguay
Centro de Cont谩ctos ingrese aqui!

  Logros y Reconocimientos del PortalGuarani.com
- Declarado de Interés Cultural Nacional por la Secretar铆a Nacional de Cultura
- Declarado de Interés Cultural por la Municipalidad de Asunci贸n
- Declarado de Interés Cultural por la Municipalidad de Luque
- Declarado de Interés Ling眉铆stico por la Secretar铆a de Pol铆ticas Ling眉铆sticas
- Declarado de Interés Tur铆stico por la Secretar铆a Nacional de Turismo
- Doble Ganador de la Premiaci贸n del World Summit Award WSA