VÍCTOR CASARTELLI (PUERTO PINASCO, 1943)
(24-VII-1994 – NOTICIAS)
“TODA NUESTRA CULTURA SIGUE SOTERRADA”
Entrevista por VICTORIO SUÁREZ
( GENERACIÓN DEL 60 - LITERATURA PARAGUAYA )
En nuestro afán de seguir recogiendo ideas acerca del panorama cultural de nuestro país, esta vez conversamos con el actual presidente de la Sociedad Paraguaya de Escritores, Víctor Casartelli, quien – como la mayoría de los escritores que fueron entrevistados por estas páginas– mostró preocupación por el actual proceso cultural. Nuestro interlocutor pertenece a la llamada generación del 60, y dio a conocer los poemarios “Todos los cielos” y “La transparencia de tus días”. Es importante destacar que formó parte del consejo de redacción de la revista “Péndulo”, que en los años sesenta cumplió un destacado papel para la difusión cultural.
–Víctor, ¿qué actividad cumple actualmente la Sociedad Paraguaya de Escritores?
–Estamos trabajando para la concreción del próximo congreso de escritores paraguayos. En ese sentido puedo señalar que prácticamente hemos logrado el apoyo financiero de algunas entidades privadas. Asimismo, ha terminado la tarea de selección de los participantes. Para este primer congreso, creímos oportuno tocar temas referentes a: literatura, política y sociedad. Con esto queremos demostrar nuestra preocupación por el andamiaje de nuestro país que vive hoy situaciones alarmantes desde todo punto de vista.
–¿Existen otros temas específicos? ¿Cuándo informarán al respecto?
–Otros puntos concretos a debatir son: mito e historicidad, y la oralidad dentro de la literatura paraguaya. Creo que en el curso de este mes estaremos dando a conocer el programa y los detalles que guardan relación con el congreso, que dicho sea de paso se llevará a cabo en la Manzana de la Rivera. También quiero adelantar que coincidentemente se está preparando una muestra del libro nacional, que probablemente será financiado por la Embajada alemana en nuestro país.
–¿Quiénes participarán de ese encuentro de escritores?
–Queremos la mayor participación. Al respecto, hemos mantenido comunicación con escritores de Asunción, Encarnación, Pedro Juan Caballero, Ciudad del Este y Villarrica. Estas ciudades son las más importantes en cuanto al desarrollo cultural.
–Entiendo que está prevista la realización de otro congreso muy importante. ¿Qué se puede adelantar en ese sentido?
–Hay un plan sumamente interesante entre la Subsecretaría de Estado de Cultura y nuestra Sociedad de Escritores para organizar un encuentro internacional. Quiero manifestar que la realización de ese congreso será muy difícil si el Estado paraguayo no apoya decididamente el emprendimiento. Llévese en cuenta que la UNESCO ha dado su aval para tan importante acontecimiento cultural. Por otra parte, algunas empresas privadas de nuestro medio mostraron gran interés en el evento. Esperamos las buenas intenciones del Gobierno, caso contrario, será un nuevo fracaso en materia de apoyo. De todos modos y a pesar de cualquier dificultad que pueda surgir, el congreso de escritores latinoamericanos es un hecho.
–¿Podés hablar de los beneficios del encuentro internacional de escritores?
–Será por sobre todo una excelente oportunidad para plantear el tema de la identidad. Además, se abrirán relevantes discusiones acerca de todo lo que involucra al campo cultural. Vamos a llevar en cuenta que ganaremos en el análisis de nuestra realidad. Es una urgencia, pues toda nuestra cultura sigue soterrada. Creo que mediante un encuentro internacional de escritores se puede alimentar el conocimiento acerca del rol de la cultura en una transición democrática. Es hora de mostrar que en el Paraguay existe realmente una rica herencia cultural. Debemos sacar a luz aquello que por tanto tiempo palpitó en nosotros de manera casi oculta.
–¿Seguimos tan mal en materia cultural?
–Vivimos momentos difíciles y la cultura es víctima de la situación. Conste que los males son también productos de la larga tiranía que mantuvo la cuestión cultural en el ostracismo absoluto, sin permitir la divulgación, el rescate, ni el fortalecimiento de nuestra cultura. La educación acrítica fue fomentada como cloroformo por el régimen anterior.
–¿Existe alguna fórmula para mejorar el protagonismo de la cultura en este proceso?
–Seguimos siendo un país donde no se armó el rompecabezas capaz de replantear la cuestión cultural. De cualquier manera, tenemos que dejar de pensar en el mecenazgo del Estado y fortalecer la autogestión a fin de ejercer el derecho y las obligaciones que tienen que ver con la cultura. De todas maneras, el Estado debe demostrar mucha voluntad política, es decir, abrir las puertas y considerar seriamente leyes adecuadas que favorezcan el campo intelectual. La voluntad política que debe venir del Gobierno es la única que puede romper los cerrojos burocráticos existentes hasta hoy. No quiero dejar de mencionar que el Ministerio de Relaciones Exteriores puede cumplir un papel preponderante a nivel de difusión del producto cultural paraguayo. Las embajadas paraguayas en tierras extranjeras deben tener agregados culturales que realmente entiendan la necesidad de salir afuera con lo que tenemos, con lo que podemos ofrecer. Si las embajadas no cumplen esa función, ¿qué podemos esperar realmente?
–Entiendo que un grupo disidente cree que la actual dirección de la Sociedad de Escritores no cumple una función crítica en nuestra sociedad. ¿Cuál es tu respuesta al respecto?
–Si hasta ahora la Sociedad de Escritores no ha cumplido una acción cuestionadora o contestataria es por la afanosa labor que estamos desarrollando en aras del próximo encuentro de escritores. Además no es justo pedir pronunciamientos precisamente a la Sociedad de Escritores. De todos modos, la situación del país necesariamente se va a evaluar en el congreso que justamente tiene temas candentes como la literatura, la política y la sociedad. No se puede negar que el país vive situaciones poco halagadoras en materia cultural. Con pena se puede comprobar que el actual viceministro Gerardo Fogel no encuentra el apoyo necesario para salir adelante. No se puede negar que tuvieron un logro importante con el año dedicado a Agustín Pío Barrios. Pero por sobre todo eso, espero que después del primer encuentro de escritores paraguayos se marcarán nuevas pautas para asumir posturas.
–Yendo a otro tema, ¿cómo nos encontramos en materia literaria? ¿Cuál es tu visión respecto a lo que se está escribiendo actualmente?
–Entiendo que en este momento la literatura paraguaya sufre de premura. Se debe al error de suponer que para ganar reputación hay que publicar mucho. Creo que se debe llevar en cuenta que se necesita mucho tiempo para madurar una obra, caso contrario, el alumbramiento precoz desfigura la intención más bella y el talento creativo. He constatado con mucho pesar que muchos están publicando de manera insustancial, no quiero dar nombres, pero algunos libros de narrativa, por ejemplo, tienen serios problemas estructurales. La sociedad de escritores, preocupada ante esa situación, piensa realizar seminarios acerca del trabajo literario.
–¿Alguna experiencia saludable en cuanto a intercambios?
–Con el escritor Guido Rodríguez Alcalá participamos en Montevideo de un encuentro con intelectuales que están en el área del Mercosur. Gracias a ese encuentro estamos proyectando otros contactos con presentaciones de libros paraguayos. El Uruguay es una cabeza de puente que nos puede dar una importante connotación en el Río de la Plata. Lo ideal sería concretar visitas recíprocas con los países vecinos, estrechar lazos de comunicación especialmente con los países del Cono Sur. Hay que abrir el mercado para que el libro paraguayo sea vendido en el exterior.