MBOCAYATY, JURISDICCIÓN DE VILLA RICA,

ANTIGUAMENTE LLAMADA CAPILLA DUARTE (3)

Por ANTONIO RAMÓN BARRETO

barreto26antonio@gmail.com

¿Cómo se vivía en los antiguos pueblos del interior del Paraguay, cómo eran sus escuelas, sus calles, sus habitantes, sus nombres, sus oficios? Que todo esto puede descubrirse en los archivos lo demuestra el investigador e historiador Antonio Ramón Barreto en esta serie sobre la historia del distrito de Mbocayaty, en el departamento del Guairá, cuya tercera entrega publicamos hoy.

En la entrega anterior, dentro de la historia de las instituciones educativas de Mbocayaty, mencionamos la Escuela Básica Nro. 138 «Digna E. Benítez», que abrió sus puertas en el local actual del Museo Municipal de Mbocayaty, frente a la plaza central. A continuación, ampliamos, con un recorte de prensa de la época, la trágica historia del nombre de esta escuela.

El crimen de Mbocayaty

La Escuela Básica Nro. 138 «Digna E. Benítez» recibió su nombre actual el 13 de mayo de 1954 por resolución Nro. 67 del Ministerio de Educación y Culto, en memoria de la maestra Digna Emérita Benítez Fernández, nacida el 23 de octubre de 1932, hija de Alejo Tristán Benítez y Narcisa Fernández González, y asesinada el 26 de febrero de 1953, a los 20 años. Transcribimos la noticia del luctuoso hecho publicada en el periódico El Surco del 3 de marzo de 1954:

«El crimen de Mbocayaty

Un crimen sin precedentes que llenó de profunda indignación a la opinión pública ha sido alevosamente perpetrado por un sujeto de nombre Guillermo Domínguez el viernes 26 del corrte. a las 18:30 horas, en la persona de una joven maestra normal, muy apreciada en el pueblo de su residencia, la Srta. Digna Emérita Benítez, de 20 años de edad, en la vecina localidad de Mbocayaty.

El criminal, de veinte y cinco años, vecino de la víctima, la hirió a mansalva mientras ésta se encontraba tranquilamente sentada a la puerta de su casa con unas visitas, infiriéndole una feroz puñalada por la espalda que penetró hasta el corazón, causándole la muerte casi instantánea.

Consumado el hecho, el criminal huyó, refugiándose en una pequeña isla de Yataity, donde fue aprehendido al día siguiente, gracias a la colaboración de las autoridades locales, especialmente de la 2da Región Militar, encontrándose a disposición de la justicia en la Cárcel de esta ciudad».

(El Surco, 3 de marzo de 1954, página 5).

Línea histórica

Ytapé y Villa Rica fueron los primeros distritos del Guairá. De estos se desprendieron los demás distritos del cuarto departamento del Paraguay; y de Mbocayaty, jurisdicción de Villa Rica, los distritos ya mencionados en la entrega anterior.

Para hilvanar la línea histórica del inicio de la población de Mbocayaty, jurisdicción de Villa Rica, es preciso empezar desde 1682, año del asentamiento definitivo de Ytapé y Villa Rica en sus lugares actuales. Recordemos que entonces este territorio pertenecía a Caazapá. Con el aumento demográfico en el establecimiento definitivo de Villa Rica comenzó la dispersión de la población, meramente española, y la búsqueda de tierras en las inmediaciones de la cordillera del Yvytyrusú con el fin explotar recursos naturales (con brazos de esclavos nativos-mulatos, y, posteriormente, de prisioneros de guerra), para pastoreo de ganado, exportación de yerba, tabaco, madera, cuero, entre otros. Algunos de los nombres de los terratenientes y explotadores de la zona, desde fines de 1700 y comienzos de 1800, fueron citados en la entrega anterior.

Sobre la división territorial de Mbocayaty en la época de Carlos Antonio López tenemos el informe del comandante Salvador Figueredo, remitido el 6 de abril de 1852. Sus límites eran: «Al costado del Este las Serranías: al Oeste el monte denominado de Ytaibu, desde Yacami hasta los Ejidos de la Villa, que sigue por el arroyo Bobo, y los esteros que concurren y forman el citado Mitay: al Norte el rio Tebicuari, y al Sud hasta un ramo de vertiente de Yacami, que divide el Peruleromi á esta parte, y el Peruleguasú jurisdicción del partido de Yacaguasu. De Norte á Sud debe tener á rumbo ruedo cinco leguas poco más o menos, abrazando la feligresía de Yatayti, y el Este al Oeste solo en uno de Yatayti se calcula como tres leguas de latitud, y en las demás partes de á dos, y hasta una legua; siendo feligreses de la Villa desde el camino público dirigido a Caaguazú, todo lo que cae al Sud, donde abarca la casa del juez de paz de hoy» (el juez en aquel tiempo, Felipe Chamorro).

Censo

Para determinar el establecimiento poblacional de Mbocayaty, ahora distrito del Guairá, sin duda debemos partir del año 1682. Según informe de Faustino de las Casas del 31 de marzo de 1682, Villa Rica se componía de 37 vecinos feudatarios y 119 moradores; 204 solteros y 225 solteras, que hacen 729 almas españolas; 14 esclavos; 126 familias de indios, que hacen 442; quedaron registradas 583 familias y 2302 almas. Sobre la línea histórica, recordemos que a Villa Rica, para el asentamiento en la falda de la serranía del Yvytyrusú, el gobernador Juan Diez de Andino otorgó licencia el 20 de mayo de 1682. La notificación llegó al día siguiente, 21 de mayo, a los procuradores, sargentos mayores García López Duarte y Pedro Benítez, designados el 20 de abril del año referido. Con estos datos cabe decir que para el censo del obispo De las Casas, Villa Rica estaba todavía en Espinillo; en Ytapé, ese año, de acuerdo al padrón de Diez de Andino, había 213 personas. En los censos de 1682 y 1700 (algunos otros son los de 1782, 1785, 1799, realizados por Melo de Portugal, Félix de Azara y Lazara Rivera, respectivamente) no encontramos a Mbocayaty; tampoco Félix de Azara, cuando visitó Villa Rica, mencionó el lugar en su diario; además, no figura en el mapa que elaboró y se publicó en París en 1809.

En el censo de 1846 del presbítero Venancio Toube, en Mbocayaty se registraron 973 almas (750 adultos, 223 párvulos; de estos, 243 confirmados); 20 años después, el juez de Paz y jefe de Milicia del partido, Felipe Chamorro, registró el 20 de marzo de 1866 en su jurisdicción 386 casas, distribuidas en Mbocayati (50); Santa Bárbara (23); Borja Potrero (31); Carandaiti (54); Loma Barreto (49); Capilla Obical (32); Valle Pita (26); Costa Estero (34); Arroyo Bobo (11); Pisadera (47); Rincón de Casco (20); Costa del Río (9); dicho informe obedece a la contribución de los vecinos de la zona para el Ejército Nacional, consistente en los siguientes «vestuarios»: 15 ponchos; 91 camisas; 245 calzoncillos; 38 chiripás. En julio y agosto de ese año se volvieron a remitir más de esas vestimentas. En 1886, en Mbocayaty se encontraron 2106 habitantes; y en relación a la hacienda, se encontraron los siguientes ganados: 4426, vacuno; 294, caballar; 5, mular; 290, lunar; 86, cabrío; 102, asnal; y 128 cerdos.

Héroes y heroínas

Todo pueblo tiene sus héroes y heroínas. En estas pocas líneas citaremos algunos que fueron enrolados el 24 de mayo de 1866 según el informe de Felipe Chamorro, como Martín Bogado, Luciano Ozuna, De la Cruz Cañaÿ, Francisco Fariña, Francisco Alvares, Carlos Arari. Mujeres y hombres del Partido Mbocayaty que donaron sus pertenencias al Ejercito Nacional en 1866, durante la Guerra del 70 (en total, 2467 cabezas de ganado para consumo del Ejército Nacional) fueron: Carmelo Talavera, Olegario Peña, Rafael Careaga, José Samudio, Pilar Ayala, Saturnino Careaga, Ygnacio Bogado, Antonio Galeano, Miguel Acosta, Ysidora Giménez, Doroteo Bogado, Felipe Chamorro, Trinidad Samudio, Lino Vásquez, Teodoro Sánchez, María Ynés Acosta, Máxima Bayo, Benito Barros, Antonio Duarte, Cipriano Gómez, Petrona Villar, Juan Antonio Barquinero, Simón Ramírez, Josefa Martínez, Santos Andino, Manuel Núñez, Rosa Clara Godoy, Juan Bautista Núñez, Carmelo Figueredo, Asunción Figueredo, Luis Villalva, Antolín Benítez, María Duarte, Pedro Duarte, Francisco Álvarez, Come Coda, Bonifacia Gimenes, Juana Barquinero, José María González, Eradia Paniagua, Salvador Fariña, Polonia Chamorro, Dominga Villalva, Martín Samudio, Domingo Paniagua, Hermógenes Talavera.

Entre las mujeres, hay más de 250 nombres encontrados en este partido que donaron sus joyas en 1867. Mencionemos a Encarnación Godoy, Petrona Paniagua de Agüero y su hija Mauricia, Felipa Bogado de Aguilar, Rafaela Fernández de Almada, Gervacia Aguilar, Eusebia Codas de Armoa, Tomasa Melgarejo de Acosta y su hija Rosa, Soledad Barreto, Marcelina Báez, Bárbara Barquinero, Evangelista Martínez, María del Rosario Cardoso, Bernarda Chamorro de Brite, Estanislaa Codas de Roa, Dolores Sosa… Firmaron el acta del 24 de febrero de ese año en representación de estas mujeres Juana Bautista Barquinero de Garcete y Manuela Jimena de Paniagua. Entre los héroes de la Batalla de Acosta Ñu, encontramos a Matías Valenzuela, de 15 años de edad.

También nombramos a algunos héroes de la Guerra del Chaco, como Natalicio Peña, nacido el 10 de noviembre de 1914, hijo de Isidoro Peña y María del Socorro, que prestó servicio en R.I. 10 Sauce, R.I. 2 de Mayo; Tiburcio Cristaldo, nacido el 9 de septiembre de 1902, hijo de Claudio Cristaldo y Gregoria Villalba, que prestó servicio en R.I. 14 Cerro Corá y R.I. 5 General Díaz; Hilario Fariña Giménez, nacido el 29 de diciembre de 1913, hijo de Tomás Fariña y Paublina Giménez, que prestó servicio en R.I. 13 Tuyutí; Amancio Ferreira López, nacido en junio de 1916, hijo de Anastacio Ferreira e Ilaria López, que sirvió en R.I 4 Curupayty; José Domingo Gauto González, nacido el 4 de agosto de 1909, hijo de Crispín Gauto y Vidal González, que sirvió en R.I. 9; Sixto Herrera Martínez, nacido el 28 de marzo de 1916, hijo de Ruperto Herrera y Juana de Dios Martínez, que sirvió en R.I. 17 Yataity Corá.

En la próxima entrega incluiremos documentos inéditos y hablaremos de la Iglesia matriz de Mbocayaty, del señor Duarte, que donó el terreno para edificar la capilla, de amancebamiento, demanda y venta de esclavos, entre otros temas.

Fuente: Suplemento Cultural del diario ABC COLOR

Edición Impresa del Domingo, 11 de Diciembre de 2022

Páginas 2 y 3

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