LA MUERTE DE JESÚS, LA RESURRECCIÓN,
ERA EL ATARDECER, ¡AMAR, A TODOS...! y SER TU, SER YO
Poesías de CÉSAR ALONSO DE LAS HERAS, S.C.J.
LA MUERTE DE JESÚS
¡Morir, Jesús! La muerte ha sido atroz pero libera.
Y ahí estás, envuelto en el sudario de
tu angustia pero con la serenidad en el semblante.
Yo sé que esta fatiga, esta desgana, no
son la muerte aún, pero cada minuto llega.
¡Ah, pueda yo morir en Tu Santa Esperanza,
acantonado no, en el combate!
LA RESURRECCIÓN
No me puedo rendir al cansancio, a la
angustia, a la tumba.
Tú me das la lección en tu cuerpo yacente,
como semilla en tierra:
Tu Pasión y tu muerte, Jesús, no quedan infecundas.
Y mi dolor, al Tuyo unido, sazona lentamente
y la Vida a la vida regenera.
(De: Rosario y Vía Crucis, 1979)
ERA EL ATARDECER
Era el atardecer.
Dulzura, paz, sosiego.
El silencio murmura.
Intimidad.
Fuera, ajetreo.
Así la vida fluye
en amor deseado.
La imagen de ti mismo
se agrande en el espejo,
que ilumina las horas.
Cumplido ya el deseo,
en el atardecer,
si tú conmigo,
quedo.
¡AMAR, A TODOS...!
¡Amar a todos y quedar
tan solo!
Corazón desbordante.
Un pozo
mana a raudales
los tesoros
de amor inagotable
y ardoroso.
Indiferente, y a su vera,
mi desidia
se reseca.
¡Tan distante el deseo,
y el amor tan cerca!
SER TU, SER YO
Ser tú, ser yo
y no saber ya
quién rige los destinos,
el telar del ensueño.
Quedar así transido
en una entrega que me da la vida.
La excitante aventura
por los mares y puertos.
Cada mañana henchida
de velamen de sedas.
Cada mañana
renovados misterios.
(De: Más que tú lo he deseado, 1995)
Fuente: POESÍA PARAGUAYA DE AYER Y HOY
TOMO I
Autora: TERESA MÉNDEZ-FAITH
Intercontinental Editora, 1995
Asunción-Paraguay, 362 páginas