ARISTAS DE UNA ESTRELLA

Poemario de SOFIA VALENZUELA

Editorial LINA S.A.

Ilustración de tapa e interior: DOMINGO FERRAIUOLO

Diseño de tapa e interior: GUIDO PEREIRA

Corrección: LILIAN STRATTA

Encarnación – Paraguay

1ra. Edición – Setiembre 2011

SOFÍA VALENZUELA DE SCHRÓDER.

Nació el 21 de marzo de 1971 en el distrito de Carlos A. López (Itapúa).

Realizó sus estudios primarios y secundarios en la localidad de Jesús de Tavarangüé donde creció junto a sus abuelos paternos.

Desde hace 16 años reside en Encamación donde se ha sumado como voluntaria a la Libroferia 5 años consecutivos.

Es fundadora junto a otros escritores de la Filial en Itapúa de la Sociedad de Escritores del Paraguay de la cual actualmente ejerce como presidenta.

Es coordinadora del taller literario (De pequeños Lectores a Grandes Escritores).

Ha dictado conferencias sobre la importancia de la lectura en Universidades, Instituciones Educativas y en Encuentros de Escritores.

Ha participado en diferentes Ferias de libros en el país y fuera de él donde su principal trabajo es promocionar los libros Itapuenses.

A la memoria de mi padre, Estrella que me guía.

A las nueve lunas blancas de mi madre.

A mis hijas, las aristas más luminarias de mi vida.

A mi esposo compañero fiel de mis estelares desvelos.

A mis amigos que comparten conmigo este universo.

Aristas de una Estrella es una fulguración en la oscuridad de la cual se desprende algo inefable y esencial.

Cobra forma en epigramas y breves versos líricos emergiendo del gesto, del dolor y de la voz.

Una Estrella escondida en la palabra que pretende dejar al lector en ese silencio imprescindible para alcanzar la luz.

Sumérjanse en las páginas cósmicas de este pequeño libro sin pretender entenderlas

solo hagan suya una Estrella y llámenla como quieran.

La autora

COMENTARIOS SOBRE EL LIBRO

«Sofía, una vez más, nos muestra sus rasgos más sublimes, así como su eterno deseo de trascendencia, a través de estos versos. Se refleja en el objeto amado, y a partir de El existe.

Este libro es un nuevo peldaño en su carrera lírica, con el que demuestra un gran crecimiento, una profunda sensibilidad, dominio del lenguaje, y sobre todo, lucidez para retratar sentimientos y pensamientos de manera casi mágica.

El hilo conductor son las constelaciones de pasiones y percepciones, que ella llama Estrellas.»

Juan de Urraza.

(Escritor Asunción - Paraguay)

Bello nombre para un poemario. El símbolo de la estrella recrea en Sofía distintos matices: de ahí sus aristas, tantas como aristas tiene la vida. Y la poesía. Sitiada por miles de estrellas habla en y por ella, que es palabra/ pulverizada de estrellas, a la que lleva prendida ...como ajorcas de estrellas. Pero también su voz le canta al silencio, arista donde tú/me hablas/ y yo me oigo. Arista es el amor, aunque sólo viva la fugacidad de una estrella/con luces prestadas/ de otro firmamento. Finalmente, aristas son los sueños que sostienen el vivir. Fúlgidas aristas cuyo brillo pervive por más que los versos afirmen que esos sueños están asidos/ a una estrella/ que dejó de brillar/ al caer la noche. O que la propia poeta reconozca: no existes, estrella/tan solo te invento. Sabemos que la luz de estrellas apagadas traspasa los universos y el tiempo (oscuridad luminosa). Y con mayor razón persisten las estrellas inventadas que se transforman en poema.

Olga Zambóni

(Escritora Misiones - Argentina)

«Aristas de una Estrella» es un sueño. Es un hermoso sueño. Es la búsqueda constante humana del sentimiento llamado AMOR fundida con la poesía y poesía que se funde con el amor. Como las dos caras de una moneda.

«Aristas de una Estrella» habla del amor, más allá de un cuerpo, más allá de una persona, más allá de todo entendimiento humano, porque nos traslada y nos hace zambullirnos sobre la esencia misma del sentimiento.

Brígido Bogado.

(Escritor Itapúa - Paraguay)

¿De dónde viene este pájaro que trina disfrazado de estrella? ¿Qué caminos recorrió el cauce de su palabra que sabe nombrar “la cúspide de toda lejanía " o contar: “en la hendidura del silencio pulsé palabras pulverizadas de estrellas

En “Aristas de una Estrella” la autora busca la fortaleza del vivir y a través del amor razona: “en el espejo me encuentro contigo, en tu voz me oigo, en tu cuerpo respiro”. Delicada y vital Sofía avanza: “Nada es cierto, todo es ambiguo” y su cuerpo “aguerrido de nardos" pide al amado: "¡Sálvame!”

Una “sonrisa frente a la adversidad", “sentados en el trono de la inocencia”, “cansada de robarme la razón, de ausentarme, de llevarme la vida a tientas”, son sólo augurios y trozos de la profundidad del vuelo de esta estrella, que aunque pueda deshacerse a sí misma en la búsqueda, quedará siempre entera, brillante y capaz de inventar otros caminos de palabras.

“Cómplices del tiempo” sus “pies de vagabunda" nos llevarán una y otra vez a su palacio: el blanco de la hoja de papel. Y en él nos dirá: ¡Te sostengo!

Lilian Stratta

(Escritora Uruguay)

«Aristas de una Estrella» es el poemario de Sofía, una luchadora inclaudicable de la cultura que nos recorre como la otra Estrella que nos lleva a saber que somos del Sur del Río Bravo. Ella que sabe lo que necesita el rio, en una época en que se lo quiere encadenar a las represas, pero el libro es de pasión, de esa que sale del corazón y recorre nuestras venas abiertas de sed de amar. Ella nos dice «En sus memos brilla una estrella de plata...», la metáfora que recorre la poeta nos señala que son los senderos del camino de la vida que buscamos en ese mar de argento que el usurpador subió por el Paraná en busca de una quimera imposible de hallar.

Pensó en un momento el significado de Lis estrellas, son masas de gases, principalmente hidrógeno y helio que emiten luz mediante reacciones nucleares, pero la autora nos dice algo que nos sorprende en el centro de nuestro ser «Estrella, tú me habitas, me circundas, y desde allí me desvelas, desconocida y frágil, y entre mis manos».

Sin duda la definición que la profesora de física me enseñó en la escuela, después de leer este verso quedará archivada como un recuerdo de mi secundaria, pero ella no deja perder el hilo en este ramillete de poemas que buceará en el sendero que muchos recorremos, pero no vemos el camino de salida, por que preferimos obviarlo o simplemente no buscarlo. Ella sin lugar a ninguna duda, sus suspiros serán recogidos por los que todos buscamos en el otro, ser respondido.

Pero este libro también nos hace una pregunta a los que amamos la naturaleza que es arrasada y aquellos que una ve? nos dieron vida, o nos protegieron en esa larga calle donde ellos están y nos protegen de la ira del viento cuando Sofía nos pregunta «¿Y tú me dices que a los pies de un árbol muerto, se esconde una alameda,..? y no podemos responderte porque tal vez la respuesta se equivoca, sabemos que los sueños y las estrellas nos llevan a recorrer el mundo buscando lo que está en nosotros mismos, y en ello la autora nos deja el deseo de descubrir el velo de los sueños de la poesía, por que lo podemos realizar en la vida como nos canta en «Tan solo fue la fugacidad de una Estrella con luces prestadas de otro firmamento, no existes, Estrella, tan solo te invento». Ahora a usted lector le queda solo leer este libro y volver a volar sobre las aristas de esta Estrella.

Eduardo Monte Jopia (Editor, Escritor - Argentina)

«Solo puedo observar el firmamento y elegir una Estrella, zambullirme en su ardiente luz toda la noche y despedirla exhausto con el alba.

Ella cambia de lugar durante el año, se aleja, se acerca, se esconde, se escapa.

No intento retenerla, ni hacerla mía, porque entiendo que es esa, su poesía.»

Carlos Rosales

☆

Hay estrellas que te hacen
caer los ojos en una estela
de eterna oscuridad
luminosa.

☆

En la oscura niebla
ceñida de pena,
un ángel
se levanta.

En sus manos brilla
una estrella de plata.

Su tez de luna,
blanca, muy blanca.

De sus ojos negros
una lágrima se desliza,
irradiando aristas de luz
con su eterna llama.

☆

Tengo amarradas las manos
a tu perfil de Picasso.
Sueño y me desvelo
en el cuenco oscuro
de tus ojos claros.
Danzo libre
en tu corpórea y grácil
geografía, y allí permanezco,
proyectada a tu sombra.

☆

Solo quiero morirme
en este ser que amo
y por quien vivo.

☆

Quiero ir más allá
de donde vine
y antes que me anuncien
elegir mi propio nombre.

☆

Bajo la contemplación celeste
de la galaxia,

Estrella, tú me habitas,
me circundas,
y desde allí
me desvelas,
desconocida y frágil,
y entre mis manos,
Estrella mía,
te deshaces.

☆

Allí, donde te acurrucas,
en la cúspide de toda lejanía,
susurra el sonido
sordo del silencio.

Se me van los ojos
juntando huellas de mis años vividos,
como ajorcas de estrellas
para cubrir los resquicios
de mis pensamientos
absurdos y vacíos.

☆

Los signos me delatan.
La luz del viento
empaña el otoño
de mis pensamientos,
la densidad de mi voz,
lo mustio pavoroso
de mi canto,
mi exilio perenne,
los veo

deslizándose de mis sueños,
cómplices del tiempo.

☆

Yo habito en un bosque
hecho cenizas
en donde no encuentro
la salida.

¿Y tú me dices
que a los pies
de un árbol muerto,
se esconde una alameda?

☆

Se dice que el amor
es algo de a dos.

Para ser dos
hay que ser distintos,
sin embargo, al mirarme
en el espejo
me encuentro contigo,
en tu voz me oigo,
en tu cuerpo respiro,
¿Entonces? ¿Qué somos?
¿Almas gemelas?

¿O un amor sin
tiempo ni destino?

☆

Nada es cierto
todo es ambiguo.
La soledad incierta,
los designios divinos.
Solo es certeza
la locura blanca
que dibujas
en la arena,
y lo inexorable
que te aguarda
el destino.

☆

Hay una configuración
celeste en tu mirada,
una luna llena
entre tus manos,
y una orgía estelar
en tus entrañas.
¡Poséeme toda
e ilumíname!

☆

Oculto en la memoria
un dolor que me quiebra.
Cabalgo en las sombras
de un difuso recuerdo
que aparece sin aviso
y en sus aguas
oscuras, ¡naufrago!

☆

He querido desposeerme
sumida en el silencio,
sentarme a tu orilla
y en tu incesante
voz, escucharme
a mí misma.

☆

Si vieras que este
cuerpo yerto
camina sin fuerzas
en un sendero
sin gloria.
Entonces
¿volverías?

☆

Se abre el abanico
del cielo
descendiendo de él
miles de estrellas,
sitiando
mi cuerpo
en una aureola
de destellos azules,

¡llevándome a la gloria!

☆

Evócame en un suspiro
que hay una puerta
abierta de paisajes
floridos y
¡sálvame!

☆

Tengo un corazón con
grietas y agujeros
¡tantos,
que me deshago!

☆

¿De qué cielo infinito
desciendes, Estrella,
a dormir sobre mí pecho!
¿De qué veta del tiempo
vienes, Estrella mía,
a espiar mis sueños?

☆

¿Qué pasado escondes
en tus mañanas!
¿Qué huellas arrebatadas
llevas en la frente?
Más allá de lo que tú
me miras
yo te miro,
te sostengo,

¡no te ausentes!

☆

Sé que no es todo
este fundirme
en tu silencio
y tú en el mío,
tu dorso desnudo
de cielo prohibido
se remonta
a todos los lugares
donde habito.

☆

Quiero mirarte
hasta que tu
figura de tiza
se aleje perdiéndose,
borrada por la humedad
de la lluvia,
regresando impávido al clamor
de la sed
de mi memoria.

☆

☆

Sobre un papel en blanco
tracé un camino
donde tú me aguardabas.
Corrí a tu encuentro
y solo vi
un espejo
que me sonrió
feliz de encontrarme.

☆

Estoy cansada
de robarme la razón,
de ausentarme,
de llevarme
la vida a tientas
sosteniendo bajo
rigor, los pensamientos
y el corazón.

☆

Un instante contigo
es como una
ceremonia donde
hablamos silencios
atesorados en el tiempo,
un instante,
en el que tú
me hablas
y yo me oigo.

☆

Necesito salirme
de esta magra
vestidura,
sacudirme
y sacarme la costra
de la piel,
y en mi invisible
pureza,
desplomarme.

☆

Para decirte te amo
yo tan solo quiero
un altar de aguas
puras y mansas,
un sol que trace
una aureola
entre tu piel
y mi alma,
y que un beso
dibuje un corazón
en la nada.

☆

Un enjambre de estrellas
humedecen la rosa desnuda,
mi cuerpo esculpido
bajo la luna
sueña dormirse
en tu orilla,
aguerrido de nardos,
y despertarse al alba
de tu horizonte
de fuego maduro.

☆

Entre las líneas del corazón
la profunda oquedad
me dejó sin aliento
en turbios sueños
cincelados de rosa
me vi espejada
con una sonrisa
agria en la boca.

☆

Entre la hendidura
del silencio
pulse palabras
pulverizadas de estrellas
con mis pies de vagabunda
sobre la cornisa de niebla
halle el camino a casa
un pequeño palacio de papel.

☆

Hay palabras que ondulan
canciones sobre la lengua,
palabras que agitan
los mares con bravura
y palabras que hilan sueños
dormidas en el silencio.

☆

No hay gesto más humano
que aquella mesura
que estimula
una sonrisa
frente a la adversidad.

☆

Los días pasados son sin retorno.
Hay que guardar
los que nos mantienen vivos.

☆

Si alguna vez regresas
a buscarme,
no me busques
donde me dejaste,
porque el día
ya se cierra
y no podrás
atravesar
la luminosidad
de mi corazón
de piedra.

☆

¿Cuándo fue el último gesto
de tu adiós sin regreso?

¿Fue acaso cuando de tu
sonrisa desgajé mil aristas
de sueños para seguir viviendo?
¿O cuando de tus manos
azorados recogí tus
latidos para que mi corazón
con el tuyo siguiera latiendo?
Tan solo fue la fugacidad
de una Estrella
con luces prestadas
de otro firmamento,
no existes, Estrella,
tan solo te invento.

☆

Nadie sabe que
en una tarde de abril
entre musgos y libélulas,
sentados en el trono
de la inocencia,
dejamos nuestros
sueños, asidos
a una Estrella
que dejó de brillar
al caer la noche.