SAMUDIO, JUAN.
ARROYO. Óleo sobre madera,
43 x 33 cm., 1920.
Propiedad Arq. Ramón González Coronel.
Asunción.
Misma obra catalogada en el libro:
ARTE ACTUAL EN EL PARAGUAY 1900-1995 (2ª EDICIÓN)
ANTECEDENTES Y DESARROLLO DEL PROCESO EN LAS ARTES PLÁSTICAS
Textos de
JOSEFINA PLÁ ; OLGA BLINDER ; TICIO ESCOBAR.
Editorial Don Bosco,
Diseño de tapa: Osvaldo Salerno,
Asunción-Paraguay, 1997. 197 pp.
COMENTARIO DE TICIO ESCOBAR:
Este paisaje fue pintado cuando comienzan influencias posimpresionistas en la obra de Samudio, traídas, probablemente, por la exposición de Julián de la Herrería. La obra, como algunas otras del pintor, significa ya un paso hacia un lenguaje específicamente visual.
Sin renunciar a la pretensión de representar valores característicos del paisaje paraguayo (presentes acá en la sensación de frescor del arroyo protegido por sombras y ramajes, la idea de "enramada" como cavidad protectora, el "pesebre" seguro, la umbría profundidad útil para guarecerse del sol u ocultarse), Samudio utiliza un juego limpio renunciando a los efectos literarios de los que se servía tradicionalmente la representación de un paisaje bucólico.
Toda la composición de la obra se orienta a reforzar la sensación fluente y dinámica del arroyo, por un lado, y la densidad desconocida de la espesura, por otro. La superficie del cuadro está dividida en zonas paralelas creadas por una franja horizontal: la arena de la playa, audazmente representada por la propia desnudez del soporte, es el elemento mediador entre el agua y la fronda y el eje que sostiene las tensiones de la obra.
La utilización del color y las texturas dependen sobre todo del orden plástico: las ramas se vuelven blancas cuando necesitan imponerse sobre el verde oscuro de la espesura, las rocas adquieren tonos verdosos y azules para integrarse al agua o al follaje, las hojas son amarillas o naranjas según un color u otro convenga al juego de luces y sombras que define la atmósfera umbrosa del cuadro. Las densidades y toques del pincel acompañan a los significados: pinceladas cortas y rápidas en el follaje, largas y densas en las rocas, planas y casi transparentes en el arroyo. En vez del verismo del tema, es el propio lenguaje plástico el que comienza a ser el portador de estos significados; la pintura se vuelve temblorosa, diáfana o maciza al volverse hoja, agua o roca. Y son sus propias formas las que sugieren el fluir calmo del arroyo o el misterio de la oscuridad de la ramada.
Samudio, Juan. El Oratorio.
Óleo sobre tela,30 x 45 cm., 1911.
Colección flia. González Rioboó.
La obra de Samudio se encuentra ya en el límite de la etapa "impresionista" de la pintura paraguaya. En la misma se encuentra presente un tratamiento más libre del color que sugiere ya las innovaciones posimpresionistas. Pero, según ya lo señalamos, aun así es difícil hablar del "impresionismo"; la pincelada suelta y breve de Samudio parece corresponder más a las necesidades técnicas de la pintura en PLEIN AIR que a las exigencias expresivas de una postura nueva. En la obra que analizamos, el espacio cerrado y calmo, casi íntimamente de sombras y de frescura, está muy lejos de esa impresión rápida y nerviosa, de ese sentido de lo efímero que supone la figuración impresionista.
De cualquier modo, Samudio significa un primer momento. Por un lado inicia los primeros intentos de expresar determinados contenidos con medios estrictamente plásticos; por otro, esos intentos le permiten dar una versión pictórica de nuestro paisaje rescatándolo en parte de la literatura de la anécdota y el tipicalismo.
Lo característico del paisaje no se define entonces por lapachos chillones ni personajes folclóricos, sino por una manera de sentir su silencio, el calor blanco e inmóvil de sus siestas, o el espacio plano y cerrado de un suelo que no conoce el mar.
Óleo sobre tabla de 35 x 22 cm.
( Reproducción en blanco y negro )
s.f. (c.1920)
Colección particular
ILUSTRACIÓN JOCOSA PARA MENÚ, 1909
Dibujo a tinta sobre papel
Propiedad del Arq. Ramón González Coronel
"El género dibujístico permitía contenidos satíricos
y liberalidades expresivas ausentes en la pintura". T.E.
Fuente:
UNA INTERPRETACIÓN DE LAS ARTES VISUALES EN EL PARAGUAY
por TICIO ESCOBAR
Editorial Servilibro, Asunción-Paraguay 2007
(1ª edición, Tomo I, 1982/ 2ª edición, Tomo II, 1984)