Biografía
ALFONSO B. CAMPOS
Nació en Asunción en 1881, hijo del médico brasileño radicado en el país, Manuel de Oliveira Campos, y de la paraguaya María de Jesús Fernández.
Perteneció a una legión de jóvenes, escasos en número, que aprendieron las ciencias contables, importante instrumento de la vida socio-económica del país. A su sensibilidad social se debe la fundación de la Sociedad de Empleados de Comercio, y la creación de la Escuela de Comercio, bajo su dirección y docencia; años más tarde Escuela Nacional de Comercio Nº 1, que hoy lleva su nombre. Desde la cátedra y con el ejemplo de su conducta, el Prof. Campos fue un esclarecido maestro de la juventud paraguaya; aporte profesional, moral y espiritual que mereció con entera justicia, un público homenaje del que fueron partícipes el Presidente de la República, Ministros del PE, autoridades académicas y exponentes de la sociedad. En la ocasión, agosto de 1955, le fue conferida la Orden Nacional del Mérito y recibió otros homenajes. El gobierno español le condecoró con la Orden del Mérito Civil. Alfonso B. Campos falleció en 1961; casado con María de las Nieves Ortiz.
"Alfonso Belisario Campos realiza los estudios primarios en una modesta escuelita; ingresa en el Colegio Nacional y en 1896 aparece en el núcleo de los fundadores de su primer Centro Estudiantil, cuya Secretaría ejerce. En 1901 figura integrando el conjunto de jóvenes que bajo la inspiración y auspicio de don Jorge Da Costa López Moreira, funda la Sociedad de Socorros Mutuos de Empleados de Comercio, primera entidad gremial de vida cierta y fructífera prolongación que se creara en el país. . . Eran los años en los que se hacía escuchar la verba encendida de Rafael Barret.... Si el bayardico español fue el primero que habló de justicia social, no es menos cierto que Campos fue el primer soldado que habló alto y trabajó fuerte por una mejor vida del empleado de comercio.
A Alfonso B. Campos no se lo puede medir con la común métrica biográfica. Pueden citarse, y se han hecho, facturas de su vida, que esplenderán en la historia patria... Pero él, la amplia majestad de su ejemplo, no puede quedar librado al caprichoso albedrío de las circunstancias. .. Mucho, como pocos, el venerable maestro hizo por la cultura paraguaya... De su historial de auténtico maestro, creemos no sea de necesidad perentoria insistir.. . La suma de bondad y perfecciones, resultaban ideales decididamente sobrehumanas. A Alfonso Belisario Campos, fiel, mejorada perduración del "médico piquinino" - su padre - no se le puede evocar con las peculiares marginaciones de las hojas vitales de cumplimiento..." (B. Riquelme García).
Fuente: BREVE HISTORIA DE GRANDES HOMBRES. Obra de LUIS G. BENÍTEZ. Ilustraciones de LUIS MENDOZA, RAÚL BECKELMANN, MIRIAM LEZCANO, SATURNINO SOTELO, PEDRO ARMOA. Industrial Gráfica Comuneros, Asunción – Paraguay. 1986 (390 páginas)