JUAN PEDRO ESCALADA
Argentino, nació en Santa Fé en 1787; vino al Paraguay en donde formó su hogar, con la paraguaya Pastora del Rosario Fretes, de Yvytymí, según JF Pérez Acosta, JP Escalada fue el maestro por excelencia por más de medio siglo; desde 1807 hasta los López. La de Escalada era una escuela privada, mientras la Escuela Central de Primeras Letras de la capital -la oficial- era regenteada por José Gabriel Téllez desde 1802. Sucesivamente confirmado por todos los gobiernos, en 1841 los Cónsules CA López - MR Alonso atendieron favorablemente una petición de aumento de sueldo del ya anciano maestro. Pocos años más tarde, Téllez fue sustituido en la regencia de la referida Escuela por Antonio María Quintana, y Escalada continuaba su labor docente.
El magisterio del maestro Escalada fue múltiple y calificado; enseñó gramática castellana, latín, francés, aritmética, contabilidad, geografía, higiene, cosmografía, redacción notarial, literatura e historia. Para el estudio de la mayoría de estas disciplinas, él mismo preparaba los textos, manuscritos. No hubo figura de algún relieve que no haya sido alguna vez su alumno; los hijos de don Carlos, MP de Peña, los Machaín, los Decoud; Berges, N. Talavera. Sobrevivientes distinguidos de la Epopeya: JC Centurión, C. Bareiro, A. Cañete, P. Urdapilleta, JS Godoy, dieron pruebas de sólida formación. En consideración a sus méritos, el Mariscal le otorgó una pensión vitalicia. JP Escalada integró el éxodo y se estableció en Atyrá. Enfermo y achacoso, regresó a la capital y falleció en agosto de 1869; fue enterrado en la Catedral.
La trayectoria docente del maestro Escalada fue proseguida por su nieta, Bienvenida Asunción Escalada, hija de Juan Manuel Escalada y Casimira Benítez. Había nacido en 1850, y a poco de regresar a la capital, fundó la Escuela Central de Niñas, la primera de la post guerra. Casada con su primo Jaime Sosa Escalada, le acompañó cuando su misión diplomática en Río de Janeiro, que diera por resultado el Tratado Sosa-Tejedor, de Paz y Límites con Argentina, denunciado por el gobierno paraguayo por imposición del Brasil. El desempeño de Asunción Escalada mereció los plácemes de propios y extraños. De regreso sumó su concurso al esfuerzo de la reconstrucción nacional. Fueron sus hijos, entre otros, Marcial y Gustavo Sosa Escalada; éste, profesor de guitarra de Agustín P. Barrios, y aquél, catedrático en la Facultad de Derecho. Asunción Escalada falleció en 1894. Su esposo, JSE, era hijo de Ignacio Sosa y Josefa Encarnación Escalada; ésta, según Sergio Recalde, era también hija del maestro JP Escalada.
Fuente: BREVE HISTORIA DE GRANDES HOMBRES. Obra de LUIS G. BENÍTEZ. Ilustraciones de LUIS MENDOZA, RAÚL BECKELMANN, MIRIAM LEZCANO, SATURNINO SOTELO, PEDRO ARMOA. Industrial Gráfica Comuneros, Asunción – Paraguay. 1986 (390 páginas)
ESCALADA, JUAN PEDRO. Santa Fe (Argentina), 29.VI.1787 – Asunción (Paraguay), 13.VIII.1869.
Educador, independentista.
En los primeros años del siglo xix, llegaba a Asunción proveniente de Buenos Aires el joven Juan Pedro Escalada, vinculado con ilustres personalidades del Río de la Plata, entre ellas María de los Remedios de Escalada de San Martín, esposa del libertador José de San Martín; del obispo monseñor Mariano José de Escalada; de Antonio José de Escalada, canciller de la Real Audiencia de Buenos Aires; del doctor Bernabé de Escalada, gobernador de Filipinas y, más tarde, primer presidente de la Casa de la Moneda y Banco de la Provincia y de las distinguidas patricias porteñas, entre ellas, María Eugenia Escalada de María y Nieves Escalada de Oroni.
Intrépido y emprendedor, con apenas veinte años, Juan Pedro Escalada abrió una escuela de las primeras letras en Asunción, durante el mandato del último gobernador que rigió los destinos de la provincia del Paraguay, Bernardo de Velasco y Huidobro. Su dedicación a la enseñanza, labor a la que consagraría toda su larga y fecunda existencia, produjo muy pronto pruebas de sinceras simpatías y gran estimación tanto en los círculos oficiales como en los sectores populares asuncenos.
En 1807, su escuela funcionaba en el Barrio San Roque y desde allí orientó y educó a gran parte de la niñez paraguaya por espacio de casi sesenta años.
Durante los acontecimientos revolucionarios de 1811, que provocaron la emancipación paraguaya, no se mantuvo ajeno y estampó su firma en el acta de la independencia. En 1812, contrajo nupcias con Pastora del Rosario Fretes Britos, oriunda de la localidad de Ibytymí. Dicho matrimonio fue el tronco de varias generaciones de notables y eximios exponentes de la cultura paraguaya. Entre su larga descendencia figuran las educadoras: Asunción Escalada y las hermanas Emiliana, Dolores y Crispina Escalada. Además, los profesores y juristas Víctor Urbieta Rojas, ex ministro de Guerra y Marina de la Guerra del Chaco, el doctor Pastor Urbieta Rojas y Marcial Sosa Escalada. Periodistas, matemáticos y músicos como Gustavo Sosa Escalada, Jaime Sosa Escalada, fundador de la Biblioteca Nacional de Asunción y cofundador de la ciudad de Resistencia, y el historiador Juan Manuel Sosa Escalada.
El magisterio del maestro Escalada fue heterogéneo y competente. Enseñó varias materias con excelencia y dominio de las mismas. Dictaba clases de Gramática, Castellano, Latín, Francés, Aritmética, Contabilidad, Geografía, Historia general, Geología, Cosmografía, Literatura y hasta Medicina e Higiene. Él mismo preparaba los textos en manuscrito y vendía a sus discípulos a precios reducidos. Es de advertir que su institución era de carácter privado, pues la oficial o Escuela Central de Primeras Letras de la capital se hallaba regenteada por otro ilustre maestro, José Gabriel Téllez.
Era el profesor Escalada de carácter afable, delgado y de estatura más bien baja, de ojos azules y risueños y de largos cabellos rubios hasta los hombros. Una alta galera y una amplia capa española adornaban su alegre fisonomía.
Fuente: https://dbe.rah.es/biografias/4