PortalGuarani.com
Inicio El Portal El Paraguay Contáctos Seguinos: Facebook - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani Twitter - PortalGuarani
ADOLFO JORGE KRONAWETTER (KIKE KRONA)
30 de Septiembre de 1941
 
ADOLFO JORGE KRONAWETTER (KIKE KRONA)


Datos biográficos:

ADOLFO JORGE KRONAWETTER (KIKE KRONA) : Cantante

Nació en Asunción el 30 de setiembre de 1941.

Realizó sus primeros estudios de música y piano con Josefa Peña de Faella. Luego, en la Escuela Nacional de Canto con Sofía Mendoza. Actuó en comedias musicales como Katiuska, Molinos de viento (1979), La viuda alegre (1984), El conde Luxemburgo (1985), La Duquesa del Bal Tabarín (1986) y la zarzuela Shíntaro.

En 1953 obtuvo el primer premio en el concurso radial el Certámen de los Barrios.

Se ha caracterizado por décadas como uno de los más brillantes intérpretes de boleros del país.

Integró primero como baterista, y luego como cantante, las siguientes orquestas: Alfredo Riquelme y Alberto Evans en la década del 50; Habanna Jazz y Harmony Club entre 1959 y 60; Big Boys Serenaders, de 1960 a 1965; Los Jokers entre 1965 y 1989; Grupo Cristal de 1989 a 1993 y nuevamente Los Jokers.

Fue el primer representante de Paraguay en los Festivales Internacionales de Viña del Mar, Chile en 1971 (junto a Moneco López y Carlos Schvartzmann).

Su producción discográfica es variada (SOLO PARA ENAMORADOS Ride Producciones. 1978), (Jokers Vol. I, Vol. II Ed. Cerro Corá 1980). 

Fue presidente del Sindicato del Músicos del Paraguay durante 10 años

Fuente: DICCIONARIO DE LA MÚSICA EN EL PARAGUAY  por LUIS SZARAN. Edición de la Jesuitenmission Nürnberg, Alemania 2007. 507 páginas. Edición digital: www.luisszaran.org.

 

 

 


KIKE KRONA

Cantante y baterista


E: Previamente Kike quisiera que me cuentes, ¿cómo te iniciaste en la música?

K: Yo prácticamente debuté en el Teatro Municipal, por eso festejé ahora (en el 2011) mis setenta años de vida biológica en el Teatro Municipal. Siempre en la escuela, era el número puesto, para recitar o cantar algo, ya sea en el día de la madre, o el día del maestro. Entonces, ahí los días domingos de mañana había un concurso para niños que subíamos a cantar, y yo ahí debuté con la canción “Mi oración azul”, un tema que gustaba a mi mamá, después mamá quería que yo siga formándome en la música, de chico me llevaba a estudiar con Doña Pepita Faella, la madre de Oscar Faella, que fue la formadora de muchos músicos.

E: ¿Qué enseñaba Doña Pepita?

K: Ella era pianista y profesora de música, hasta armonía enseñaba, muchas cosas sabía, su especialidad era la docencia a niños, muchos niños tenía, entre ellos yo, muy chico.

E: ¿Eso en qué año fue?

K: Eso habrá sido en el año 50, yo ya había estudiado, en ese entonces comenzaba a estudiar piano, pero después dejé porque me era difícil, había que tener un piano en la casa. Ese era el problema, pero igual estudiaba, con ella hice todo el primer año. Ella tenía un método para niños, por ejemplo te mostraba una cebolla, te decía: “¿Esto cuánto tiempo vale?”. Por ejemplo cuatro tiempos, una redonda. “Uno, dos, tres, cuatro y estos dos negritos con dos patitas son unas corcheas, uno, dos, tres, cuatro”... y así aprendí a leer música.

Después se dio la situación en el barrio justamente con Dani Nasta, solíamos recordar como yo me crie en el centro, era el único que no tenía bicicleta, el día que mi viejo me iba a regalar una en el 50, mi mamá enviudó. Mi viejo había viajado a Vallemí y vino con una enfermedad muy rara, que era paludismo nomás, pero en esa época era muy difícil curar. Recuerdo que en el mes de noviembre vino de Vallemí para hacerse un control, y le acompañaba caminando hasta Independencia Nacional y Luis A. de Herrera, hacia el Ministerio de Salud.

Me dijo: “a la vuelta, te regalo la bicicleta”, alemán - austriaco era, me pidió que vaya a casa, me prometió que a la vuelta me llevaría la bicicleta por haber pasado de grado, eso fue en el 50. Luego yo le estaba esperando alrededor de las diez de la mañana, mi padre no estaba volviendo y vi movimientos raros en la casa, ahí se acercaron mis hermanos mayores... “queremos contarte algo” me dijeron, les dije: “¿qué es lo que pasa? yo le estoy esperando a papá que venga para ir a traer la bicicleta de Villa Longa”, costaba 800 guaraníes. Finalmente alrededor de las once de la mañana me dijeron: “¡papá ya no va a volver más!”... yo reaccioné y dije: “¿Cómo no va volver más?, ¿y mi bicicleta?” Tenía 8 años no entendía nada, “papá se fue al cielo ya no va volver más, le dieron un remedio equivocado ahí en el Ministerio de Salud y se murió”.

Tres años después escuché que se iba a realizar un certamen de concurso de los Barrios, siempre andaba cantando y decidí participar, esto fue en el 53 y en una de las noches de mi participación estaba como público Luis A del Paraná y yo de pantalones cortos. La dirección de la radio era Independencia Nacional y Primera Proyectada estaba llena de gente, me anoté para participar, me fui escondido de mi madre. Como no volvía más, ella estaba muy preocupada, en eso le contó una vecina: “Kike está cantando en la radio”, y prendió la radio y me escuchó cantando, pero se enojó tanto conmigo que a la vuelta me dio un cintarazo, por irme sin su permiso.

Paraná también estaba escuchando y me citó al Hotel Colonial para enseñarme a cantar. Al día siguiente me fui junto a él y no me atendió, como insistí mucho le dije a mi prima para acompañarme, llegamos a las diez de la mañana por ahí y me escondí detrás de un pilar. Y ahí baja Paraná y salgo detrás del pilar y me encuentra Paraná y me dice: “que haces acá”, le digo: vine con mi prima, vine ayer y no me dieron pelota”, “no, discúlpame no me avisaron” respondió. Le presenté a mi prima y dijo: “pero qué linda”. Bueno, esa es el anécdota con Paraná, entonces pasamos a practicar con su guitarra tipo flamenca y me enseñó el tema “Guadalupe”, y con ese tema gané el certamen de los Barrios.

Era muy pegado a mi madre, siempre vivía con ella, me llevaba a practicar con Sofía Mendoza recomendado por mi primo Jonhy Torales con quien también hacía vocalización en su casa y ahí él me enseñaba, me dijo: “vas a cantar este tema que es una guarania, saca algo para copiar” y era el tema “Recuerdo de Ypacarai”. Fui el primero en cantar acá y esa misma noche gané el Certamen de los Barrios. Después mi mamá me llevó junto a Sofía Mendoza, pero ella tenía otra escuela, me dijo: “él no tiene que cantar con esa voz, no tiene que cantar cuando está cambiando la voz, que cambie la voz y después viene a practicar, a los 17 años que venga”. Ella se equivocó, esa técnica hoy está desechada, pero ella vino de Italia y fue la formadora de muchos: Oscar Barreto Aguayo, Alberto Gines, Isaac Ortiz, Ana María Casamayouret, Clotilde Balmelli, de mucha gente.

Ahí agarré la batería, porque no quería quedarme sin hacer música, entonces a Jonhy le acompañaba, como era mi primo y siempre le acompañaba con la orquesta de Alfredo Riquelme cuando venía acá, de Buenos Aires, me llevaba para tocar el bongó. Y después un día me senté en la batería y dije que podía hacer esto, que algo quería tocar, y entré en contacto con Nene Barreto, él era el único, porque era el hermano de Athos Bernal, el primero que estudió batería con técnica en la Argentina, Viri Bernal se llamaba.

E: ¿Viri Bernal?

K: Es Viri su hermano, tenía técnica porque muchos no sabían cómo agarrar el palillo y hasta que le vio a Nene. Después se fue a vivir a Posadas y Nene quedó acá como el master en este tema. Quedaba horas y horas a practicar, sangraba a veces mi mano, estudié mucho con él, tal es así que los memoriosos recuerdan que yo tenía una buena técnica para la época.

E: A mí, él que me dijo eso fue Carlos Shvartzman. Dijo que era muy buen baterista.

K: Sí, estudié mucho con Nene, y un día le dije que ya quería tocar en una buena orquesta, y me dijo: “sabes que el Maestro Riquelme está queriendo un baterista, vos ya estás para tocar”. Escuchábamos a Lalo Schifrin y al “Gato” Barbieri por radio, realmente ahí aprendí a amar la música, recuerdo que movíamos la antena de la radio para poder escuchar, escuchar a aquellos era lo máximo.

E: ¿Qué radio agarraba?

K.: Radio Mundo.

E: ¿De Buenos Aires?

K: Sí, de Buenos Aires, la señal era “onda corta” realmente costaba escuchar. Fue una linda experiencia. De ahí tuve la oportunidad de tocar con el Maestro Alfredo Riquelme, bajo la recomendación de Nene. Inclusive ese año tuve que dejar hasta el colegio para tocar con ellos, me pasaba el día practicando y escuchando Jazz. Perdí un año entero así, mi madre no sabía lo que andaba haciendo. Hice hasta el tercero el colegio Goethe, hace poco estuve desfilando con ellos.

E: Alfredo Riquelme, ¿quién era?

K: El tocaba trompeta y violín en la época, curiosamente La Orquesta de Jazz de Riquelme, se convertía después en La Típica Servín, yo con la típica no todos, sólo tocaba la batería con la orquesta de Jazz; posteriormente pasé a La Orquesta de Alberto Evans también de la época, un trompetista reconocido, contemporáneo de Neneco Norton, el pequeño grande del Jazz, con quien también llegue a tocar. Son de los grandes que quedan todavía.

Paralelamente en La Orquesta de Alberto Evans, le conocí a Oscar Barreto Aguayo, con quien tuve una amistad muy linda, como yo quería siempre volver al canto, continué estudiando canto, tocaba batería y también cantaba, ambas cosas me gustaban. Oscar Barreto cantaba con Alberto Evans y luego yo me incorpore a La Habana Jazz. Realmente yo iba de menos y a más de a más, mejorando, además era baile los sábados con La Orquesta de Riquelme, tocábamos en lugares como el “Club Náutico San Bernardino”, era lo máximo para la época actuar por ahí. Alberto Evans era Orquesta del Club Centenario, de ahí vienen los contratos y otras cosas, luego con La Habana Jazz.

E: ¿En La Habana Jazz, quienes estaban?

K: Estaba como director Chono Duarte, Victorio Ortiz con el saxo y canto, Arturo Pereira en la trompeta. Arturo Pereira el papá de Remigio, era trompetista y violinista, también como integrante estaba Yoyo González saxo alto, y saxo tenor Victorio Ortiz, yo entré a remplazarle a un tal Fernández y Cuevas en el bajo.

E: Kike. ¿Qué tipo de repertorios hacían con La Habana Jazz?

K: Hacíamos “Patrulla Americana”, “Collar de Perlas”, no descartábamos casi nada. Chono hacía su propio arreglo con los estilos más lentos, además Cha Cha Cha. Rudy Heyn ya estaba en cartelera con su orquesta, aparecía con todo, tenía dos “negros” que llamaban mucho la atención, decía Rudy Heyn y los hermanos Cuba, uno tocaba bongó y el otro medio espigado tocaba maraca.

E: ¿Pero eran brasileños, cubanos?

K: Eran cubanos que se quedaron a vivir acá, integraban el grupo de Rudy Heyn, pero luego se separaron, llegaron a casarse inclusive por acá, uno de ellos murió muy mal en el Hospital de Clínicas, Rudy le ayudó mucho en ese momento, fue alrededor del año 55, 56 por ahí, cuando en ese tiempo integré El Harmony Club y fuimos a actuar a Buenos Aires, tuvimos un contrato muy lindo, fuimos a actuar nada menos que en el “Richmond”.

E: ¿En qué año fue eso?

K: Eso fue en el año 1959, recuerdo muy bien.

E: Vos, ¿hasta cuándo estuviste?

K: Yo estuve un año, ese viaje a Buenos Aires fue fatal, ahí se desintegra el grupo, no sé por qué ocurrió, parece que nos separamos por la salida de Kiko Arce, la primera voz del grupo, como quería casarse, fue el primero en separarse, y como no había otro igual a él, porque realmente estaba en un nivel muy superior, cantaba el tema “Only You” de Los Plateros, los temas de moda de allá, todo eso lo hacíamos con él, pero curiosamente a Kiko lo quisieron dejar en Buenos Aires. Hicimos una prueba, pero quería venir demasiado, conste que en ese tiempo su novia estaba estudiando allá en la Argentina. Los fines de semana tocábamos en Corrientes y Esmeralda un lugar “tanguero” teníamos actividades intensas, nos cruzábamos con Los Bachilleres de Oscar Cardozo Ocampos, siempre nos quedábamos a cenar con ellos después de las actuaciones.

E: ¿Se ganaba buena plata?

K: Vivíamos bien, se ganaba buena plata, pero nuestro representante, que siempre andaba con nosotros, un día nos abandonó, nos dejó sin plata, nos complicó todo para pagar el Hotel porque el representante se fue con nuestro contrato. Teníamos que actuar en la ópera, me acuerdo que la película era de los actores Richard Barton y Elizabeth Taylor, pero el representante era tan mentiroso, colocaba afiches en el obelisco con nuestras fotografías, nos hacía pasar por norteamericanos. El tipo nos presentaba como norteamericano: The Jazz Armony. Le reclamábamos por qué hacía eso, nos respondía que era para ganar más así teníamos más marketing nos decía, y el único que hablaba inglés era Teddy Medina, como actuábamos en el “Richmond” vinieron unos tipos a hablarnos en inglés, lo único que quería hacer en ese momento era salir a correr al vestuario. Al volver de esa gira se desintegró el grupo, te estoy resumiendo como sucedieron las cosas. Y ahí mira como sucedieron las cosas. Me vieron para entrar en La Big Boys Serenade y entré como baterista otra vez.

K: Me acuerdo Castro Darío Martínez me decía: “felizmente vos estás adentro... yo no sé qué hacer, a qué me voy a dedicar, no sé hacer otra cosa”. Luego una semana después llama a casa por teléfono y me dijo: “¿no querés escuchar un ensayo?, estamos formando un trío, ándate sobre la calle 22 de septiembre cerca de la Iglesia San Miguel, está tu primo Johnny Torales” Me voy, escucho y ahí nacen el Trío Los Sudamericanos.

Finalmente estuve cinco años con el grupo Big Boys Serenaders, pero me pasó un fenómeno curioso, estando con un grupo exitoso, decidí retirarme del grupo, bueno como joven quería divertirme. Increíble lo que hice.

E: ¿Era muy intenso el trabajo?

K: Sí

E: ¡Qué buenos músicos tenían!

K: Realmente en el Armony Club teníamos muy buenos músicos, en saxo le queríamos llevar a Palito Miranda, pero ya estaba viajando a Brasil, se encontraba con Pepe Silva un español que ejecutaba muy bien el saxo alto. Con nosotros estaba Rubén Ortiz en el piano y en el bajo Burian que se quedó en España, se fue con los Tríos Sudamericanos.

E: ¿Quién es Burian?

K: El sobrino de Chiquito Burian, el famoso Pitogué Burián.

E: ¿Pero en esa época eras muy joven verdad?

K: Sí, todos éramos muy jóvenes, estábamos por los 20 años. Yo era el menor de todos y estaba en el cuartel. Antes de irme a Buenos Aires tenía la cabeza muy pelada, llamaba la atención, bueno esto pasó en el año 65, yo me retiré, me hicieron la despedida en el “Jardín de la Cerveza” el grupo Big Boys. Me preguntaban el por qué dejar la música, pero yo quería salir a disfrutar de la fiesta, hacer vida normal de un joven de mi edad. También en ese momento salió de  nuestro grupo Báez Allende el guitarrista, entró a trabajar en el Poder Judicial. Luego ingresó Carlos Báez Renhsfelt que tocaba bajo además tocaba muy bien piano, él fue a Alemania a estudiar dos años derecho penal y guitarra, volvió siendo gran concertista, realmente tocaba muy bien.

Copiábamos exactamente igual a la grabación los temas, no así Los Big Boys que tenía muy buenos arreglos, se encargaba Benza, como “Flamengo”, “El hormiguero”, “Indeciso”, arreglos muy buenos, acordeón unísono con guitarra, Benza hasta ahora tiene todas las grabaciones.

E: ¿Vos no cantabas en esa época?

K: En ese momento quería volver a cantar, estaba estudiando con Sofía Mendoza, pero el grupo era conformado por muy buenos músicos. Kiko Arce con Hugo hacían muy buenas voces, Gladys Cañete también integraba, era un grupo al cual siempre me iba a escuchar en el “Belvedere”.

E: ¿Gladys estuvo desde un comienzo con ellos?

K: No, primero estuvo Rubén Belmon, hoy ya fallecido. Luego entro Kiko Arce con Gladys y me incorporo también como baterista en el año 1965. Ese año, en julio, fuimos a actuar en Pedro Juan Caballero, teníamos actuaciones acá en Asunción, el grupo era muy o igual que Los Big Boys. Como Gladys la vocalista decidió dejar el grupo en ese momento porque iba a casarse, Hugo me designó como vocalista, recuerdo estaba muy contento porque siempre quise volver a cantar, bueno entonces así retomé el canto.

E: ¿Quien entró como baterista?

K: Entro Ángel Fanego, todo eso ocurrió en el 65, en el mismo año que entré como baterista, pasé a cantar.

E: ¿Ya tenías algún repertorio?

K: Tenia algunos boleros, desde ese año fuimos contratados para actuar en ciudades como Encarnación, San Juan, pasamos a Posadas, a la “Casa Paraguaya”, de paso me iba a recorrer las disquerías, y escuché un tema que me llamaba la atención, entonces averigüe, era un disco que llegó recién de Buenos Aires de Charles Aznavour “Venecia sin ti”, desde ese año empecé a cantar y hasta ahora forma parte de mi repertorio.

E: La otra orquesta que integraste fue Los Jokers ¿De dónde sacaron el nombre?

K: La verdad que los fundadores fueron Telmo Aquino en la guitarra, Palito Miranda y Popo Vera, en la Plaza Uruguaya estaban hablando para formar la orquesta y ahí nació el nombre.

E: ¿Palón Báez también estaba integrando?

K: El todavía no estaba, después llegó a integrar Los Jokers ejecutando saxo tenor, él nunca estudió saxo porque era clarinetista, pero se formó así nomás y era muy bueno. Hay un hecho, en Los Big Boys, subió un poco el estatus de músico, porque el concepto sobre el músico era sinónimo de vago, haragán, mujeriego, de todo.

E: ¿Eran universitarios porque eran médicos?

K: Eran la mayoría estudiantes de medicina, casi todo eran aficionado conservaban sus estudios con la música, en la batería estaba un tal Villasboa que después se quedó en Los Big Boys, Rudy Heyn también ya estaba ejecutando muy bien. Con todos estos grupos terminan las grandes bandas como La Jazz Casa Blanca, Las Estrellas Paraguayas del Jazz, La Jazz ideal de los Hermanos Acosta, eran las bandas tradicionales con trompeta, saxo, Neneco Norton actuaba siempre en el Mbiguá, también Rudy con la guitarra y como vocalista Gregorio Marini.

 

 

E: ¿Con Los Jokers termina las grandes bandas?

K: Terminan pero empiezan las bandas del Club Alemán como Los Hobbies, que siempre actuaban en ese local, también aparecieron Los Aftermad’s, Los Tommys.

Estuve diez años como presidente de sindicatos de músicos, me tocó la parte más difícil. En ese momento nos separamos del grupo de la Asociación de músicos, tenían miedo de que se convirtiera en un monopolio de dos o tres grupos nomás. Teníamos asambleas que duraban horas para poder entendernos y no hubo solución, entonces decidimos fundar otro gremio fuera de la Asociación de músicos. Los músicos tradicionalistas pensaban que íbamos a acaparar todo, pero le explicábamos que iba a haber trabajo para todos, porque tenía que haber los grupos de soporte. En el Sindicato se quedaban los músicos de Baile y en la Asociación los otros como Papi y Nene con quien llevaba muy buena amistad.

E: ¿Qué hacía la gente de la Asociación en ese momento?

K: Nada prácticamente, nosotros contratamos como abogado a “Mochito”, Juan Manuel Morales. Realmente nos hacían la guerra para poder dejarnos sin trabajo, pero había muchos bailes. Por ejemplo un sábado con Los Jokers, teníamos cinco actuaciones en fiestas de clubes, no había otra cosa, las discotecas no existían, entonces se peleaban por tenernos a nosotros que éramos las orquestas que llenábamos los bailes.

E: ¿En esa época no existía restricción de horarios?

K: Sí había. Las restricciones horarias nos creaba problemas, porque teníamos que empezar a las 8 de la noche para terminar a las 2 de la madrugada, también apareció el famoso Decreto 81/27 que regía la obligatoriedad de la música paraguaya, entonces metíamos a las orquestas típicas a las 7 de la noche al escenario, generalmente tocaban un tiempo de una hora y luego entrábamos nosotros. Siempre aparecían algunas personas de la Secretaria de Informaciones a grabar las fiestas. Recuerdo que Aníbal Fernández, Secretario del Presidente de la República, siempre nos citaban a los directores de Orquesta al Palacio después de las fiestas por incumplir el horario que tenía que ser siempre del 50% de música paraguaya en la actuación. Todo eso ocurrió en los años 70 para arriba.

E: ¿Después empezaron a entrar los Disc-Jokey?

K: Sí empezaron también en Brasil, pero acá los locutores se volvían más famosos como disc-jockey. Al entrar a los 80 empezamos a perder éxito, llegamos a tener 16 orquestas de baile en el Sindicato de Músicos.

E: Hablando de eso, ¿la Policía grababa las actuaciones para comprobar que no se cumplía con el 50% de música paraguaya, como estaba en la Ley?

K: Sí se grababa. A lo mejor en el “Archivo del Terror” están esos documentos, también habían “informantes” que denunciaban del incumplimiento del 50%. APA nunca estuvo en contra nuestra porque a ellos les convenía, se quedaban con el 10% de las ganancias.

E: Sobre todo de esa primera época, que te tocó estar en orquestas de Jazz, ¿Qué anécdotas o personajes recordaste? Por ejemplo Villagra y Papi también nos recordaba a este Cabañas....

K: Benjamín Cabañas es uno fuera de serie, un médico que tocaba saxo, realmente tiene una rica historia, un tipo de buen humor. Yo tocaba batería, tipo 5 a 8 de la noche, de repente él llegaba con su saxo y tocaba cualquier cosa, por ejemplo “Té para dos”, “Tenías que ser tu”, “Pequeña flor”, “Pobre mariposa” esos eran sus repertorios, saxo alto con vibrato, un sonido medio raro, con él se mejoró mucho el estatus de músico. Conste que a mí me rechazaron en varias casas por ser músico, tal es así que al Club Centenario le agarré un capricho porque debía ser Vitalicio ya, no quise ser socio de ese Club, era una rebeldía de la edad.

Hay una anécdota con Los Hobbies, en la década del 70, en el Porvenir Guaireño, la quinceañera quería bailar con Jorge Strubin, el bajista del grupo, sale a bailar con ella y sale el encargado a decirle que no podía por ser músico, entonces el alemán apagó el equipo. Se negaron a tocar y se armó un gran problema.

E: Según tu opinión ¿eso cambió un poco ahora?

K: Cambió mucho hoy en día, porque hay muchos jóvenes estudiando en el Conservatorio, en la universidad, en el proyecto Sonidos de la Tierra, entonces están más preparados, mejoró mucho el nivel como músico. Vale este ejemplo, cuando vinieron Los Tres Sudamericanos, la última vez, me voy a buscar al Hotel a mi primo y lo llevo al ensayo y me dice Alma María cuando entra y ve una mezcla de gente joven con gente mayores: ; “¿pero tocan estos?”, le dije: “te vas a llevar una sorpresa”. Empezaron a tocar y ella se quedó asombrada, no pudo creer, justamente esa es la diferencia.

E: Esas grabaciones de las fiestas que hacían en la época de Stroessner, ¿eran policías del Ministerio del Interior?

K: Difícil de saber porque siempre había informantes en cualquier parte. Una anécdota de Cabañas, estábamos en el Panuncio, esto mismo él hizo en el "Rubio”, queríamos sentarnos y estaba lleno, a eso de las tres de la mañana, para variar tenía un vaso de whisky, y me dice: “¿Querés sentarte? Espera te vas a sentar” Y de repente se levanta a gritar: “Queridos camaradas, el comunismo tiene que llegar para sacarle a este déspota de Stroessner”, la gente salía todo corriendo, nos quedamos solos.

E: Están más fotos acá.

K: Este es El Jazz Club Paraguayo, junto a Nene, Palito, tocaba Palón. Los Blue Notes era un grupo que Papi ya traía a través de Don Elías Hernández que era director de cultural, los arreglos se traía de Estado Unidos.

E: ¿Dónde funcionaba El Jazz Club Paraguayo?

K: En el Centro Cultural Paraguayo Americano, eran prácticamente los dueños, Elías Hernández estuvo dos años. Luego le renovaron el contrato. Además estaba Kuki Rei, que vino al Paraguay allá por los 60, Palito también estaba.

Fuente: Músicos de Orquestas Bailables Asuncenas 1950 - 1980: Relatos y Anécdotas © Rodolfo Elias Acosta. Rodolfo Elías: Coordinador. Oscar Gaona: Investigador. Vicente Morales: Investigador y responsable de registro fotográfico. Editado con los auspicios del FONDEC. Asunción - Paraguay, 2013 (131 páginas)





 

Buscador PortalGuarani.com de Artistas y Autores Paraguayos

 

 

Portal Guarani © 2024
Todos los derechos reservados, Asunción - Paraguay
CEO Eduardo Pratt, Desarollador Ing. Gustavo Lezcano, Contenidos Lic.Rosanna López Vera

Logros y Reconocimientos del Portal
- Declarado de Interés Cultural Nacional
- Declarado de Interés Cultural Municipal
- Doble Ganador del WSA