Aún retumbaban en los oídos, como una memoria de la intolerancia entre paraguayos, los cañones del enfrentamiento entre los liberales sáko mbyky y sáko puku (1922-1923). Ya el coronel ADOLFO CHIRIFE había sido derrotado en KA'I PUENTE -hoy CORONEL BOGADO-, por el ejército al mando de JOSÉ FÉLIX ESTIGARRIBIA. En el ambiente asunceno aún había olor a pólvora.
Allí, en ese clima de temor y esperanza, en el Colegio San José de nuestra capital, estaba a punto de nacer una canción que con los años se haría emblemática y acompañaría la lucha por la libertad de nuestro pueblo: PATRIA QUERIDA.
El 12 de octubre de 1923 en la cancha del Club Olimpia -que era entonces parte del Parque Caballero-, se llevan a cabo los torneos y la exhibición gimnástica programados para celebrar la beatificación del padre MIGUEL GARICOITS, de la CONGREGACIÓN DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS DE BETHARRAM, a la que pertenece el colegio San José.
El programa desarrollado en aquella ocasión incluía, al final, la entonación del HIMNO DE LA RAZA. El padre CÉSAR ALONSO DE LAS HERAS, en el libro sobre la historia del Colegio San José (1), cuenta que después de los juegos llegó la "sorpresa extraordinaria del Himno de la Raza, con la música de LA MADELÓN, la marcha célebre francesa de la primera guerra mundial".
Acota el autor que el padre LORENZO BORDENAVE, director del colegio, reconoció el esfuerzo hecho por el también sacerdote MARCELINO NOUTZ -nacido en Bearn, Francia, el 7 de enero de 1892 y fallecido el 2 de marzo de 1962 en Asunción-, para adecuar la letra en español a la melodía francesa.
"Se consiguió un acompañamiento de piano y el padre BORDENAVE había obtenido del ministro de guerra SCHENONE el concurso de la banda militar. El director de esta banda hizo la armonización. En la víspera (del acontecimiento) se realizó un ensayo general y todo quedó listo para el 12 con la letra al dorso del programa. Las voces de los 200 alumnos se elevaron así sostenidas por la banda militar", escribe el pa'i Alonso.
Es obvio que Noutz llamó a su obra HIMNO DE LA RAZA porque su estreno se producía un 12 de octubre. Con el tiempo, como ocurrió con numerosas obras de nuestro cancionero popular, el tema fue rebautizado como PATRIA QUERIDA -el coro, que tiene mucha fuerza, comienza con esas palabras-, que es como se la conoce hoy.
El coronel ARTURO BRAY que, curiosamente -mirando desde el presente, porque en el pasado no era tan raro-, une su condición de militar a la de brillante escritor, en sus memoria (2), da otra versión acerca del nacimiento de PATRIA QUERIDA.
"Por aquellos años pedí a mi querido amigo, el ya nombrado padre Marcelino Noutz, que le pusiera en español a la conocida canción LA MADELÓN tan en boga en el ejército francés durante la primera guerra mundial. Accedió el P Noutz con todo gusto a mi pedido; en esa forma nació lo que hoy se entona en cuarteles y colegios, cuyas estrofas iniciales son: “Patria querida, somos tu esperanza...”. Fue cantada por vez primera por los soldados del batallón 5° de Infantería, cuyo mando ejercía yo en Puerto Sajonia el 27 de noviembre de 1924", sostiene Bray.
Podríamos confiar en que fue el militar el que le pidió la letra en español. Sin embargo, el programa del Día de la Raza certifica acabadamente que su estreno fue el 12 de octubre de 1923 y no casi más de un año después.
Ahora queda por saber qué es LA MADELÓN. "Era uno de los himnos de la Legión Francesa. La letra menciona a una cantinera que estaba en uno de los puestos de la Legión que, como se sabe, quedaba al norte de África. Los versos dicen -lo recuerdo porque lo escuchaba de niño en España donde se la dedicaban en la radio a los soldados españoles que estaban combatiendo en Marruecos- lo siguiente: Para gozar de un descanso en la pelea/ el militar siempre debe disponer de un cabaret/ donde beba y se divierta. Describe luego a una chica alegre -La Madelón-, simpática, a la que todos piden la mano pero ella se niega a darla porque está destinada a servir la bebida a los legionarios", indica el periodista ANTONIO CARMONA, español por nacimiento, paraguayo por adopción.
Según el relato de SEBASTIÁN VILLAREJO, presidente de la Academia Literaria de los Exalumnos del Colegio San José, el padre PIERRE LABOUARDAT contó que cuando vino al Paraguay el presidente francés CHARLES DE GAULLE -en la década de 1960-, los estudiantes del San José le cantaron, frente al palco oficial donde también estaba el dictador ALFREDO STROESSNER, PATRIA QUERIDA. "De Gaulle no entendió los versos de Noutz, sólo recordó los de 'La Madelón que no son justamente para una parada o algo así.
En los periódicos de Francia se contó la noticia: “Alumnos del Saint Joseph d' Assumption” cantaron al general De Gaulle la música de fiestas del ejército francés. Indignados los parientes de los curas franceses del colegio enviaron cartas recriminando por esa actitud", cuenta Villarejo.
(1) Alonso de las Heras, César: Historia del colegio San José, Los primeros 50 años,
Tomo I. Asunción, Junta de Exalumnos del Colegio San José, 1997.
(2) Ray, Arturo: Armas y letras, memorias, tomo l. Asunción, NAPA, 1981.
PATRIA QUERIDA
Robusto el cuerpo, la frente siempre erguida,
alegres, vamos en pos de tu pendón.
Y en tu loor, sube, patria tan querida,
de nuestro amor la más férvida canción.
Eres la tierra encantadora,
llena de luz y de placer,
donde gentil brilla la aurora,
donde sonríe todo ser.
Silente el cielo azul,
las selvas con su voz
alientan nuestras vidas
cual favor de Dios.
CORO
Patria querida, somos tu esperanza,
somos la flor del bello porvenir,
volverá tu antigua bienandanza
con su fama a relucir.
Y en los anales de tu noble historia
te lo juramos va nuestro valor
a escribir la página de gloria
del honor, del honor, del honor.
Si por desgracia el clarín de la batalla
nos llama algún día a cumplir un gran deber
serán allá nuestros pechos la muralla
que detendrán las afrentas a tu ser.
Libre serás, oh patria amada,
mientras tengamos el rubí
de nuestra sangre derramada
triunfante allá en Curupayty.
El lema de valor que siempre ha de seguir
la raza paraguaya es vencer o morir.