SÍNTESIS CRONOLÓGICA DEL MUEBLE COLONIAL
Extraído del libro:
"EL MUEBLE COLONIAL DEL PARAGUAY" de NEÍDA BONNET DE MENDONÇA.
SIGLO XVI
Pedro de Mendoza introduce en el Río de la Plata muebles renacent istas y moriscos (casi al mismo tiempo en que Loyola funda en Europa la Compañía de Jesús). Dice Furlong: "fue Pedro de Mendoza quien inauguró entre nosotros la mueblería fina de lujo, ya que trajo de la metrópolis 43 piezas diversas, y todas ellas de alta jerarquía, y con ellas amuebló las salas de su palacio en aquella efímera Buenos Aires, fundada por él, muy posible es que más de unos de los grandes señores que vinieron en aquella fracasada expedición trajera algunos que otros muebles de su predilección. Los hombres -de Mendoza remontan el Paraná llevando a bordo algunos elementos. Fundan Asunción que recogerá y transformará esos elementos ".
Guillermo Furlong S:J., Llegó a la conclusión de que la fabricación de muebles en el Paraguay era considerable ya desde tiempos de Irala. Es más, colige que muchos de los muebles importados desde Buenos Aires, en la postrimería del siglo XVI y a comienzo del siglo XVII, eran realizados no sólo en Europa, Brasil y Perú sino también en el Paraguay. Se supone que esos muebles no fueron frabricados en talleres misioneros porque aun no funcionaban en esa época. Furlong llega a esta conclusión citando un documento del año 1582, publicado por Lizondo Borda.
CAMA
Siglo XIX
Donación Aurora y Nino Fernández
Centro de Artes Visuales / Museo del Barro
Fundación “Carlos Colombino”
SILLÓN FRAILERO ÁREA FRANCISCANA
Siglo XVIII
Museo “Monseñor Juan S. Bogarín”
ESCRITORIO
Principios del Siglo XIX
Perteneció a Pedro Juan Caballero
Museo “Monseñor Juan S Bogarín”
SIGLO XVII
El siglo XVII fue una etapa difícil para el Paraguay, por muchos motivos, tales como: la división de la Provincia Gigante de las Indias, el aislamiento, la amenaza de los bandeirantes, etc.-: Estos no eran tiempos para que se desarrollaran manifestaciones estéticas fuera de las artesanías populares. Durante este período, en los talleres jesuíticos, no se fabricaban muebles destinados al uso de civiles; los artesanos particulares eran muy pocos.
En pleno siglo XVII era difícil encontrar muebles de buena factura en Asunción. Dice Josefina Pla:
"Cuando en 1619 hubo que equipar la casa de un nuevo gobernador no se halló en toda Asunción un vecino que pudiera proporcionar la modesta mesa y las seis sillas necesarias para amueblar la sala”.
Persiste el mueble renacentista con progreso en la talla y el terminado: Pocos ejemplares subsisten. La información se obtiene a través de los inventarios. Penetra por Brasil el mueble portugués.
Comienza el poblamiento con pueblos de indios llamados Reducciones y los jesuitas impulsan el arte creando un barroco misionero.
"Los Padres misioneros vinieron provistos de algunos muebles y diseños europeos de sus respectivos países, que sirvieron al principio de modelo, desarrollándose así paulatinamente con el tiempo el instinto imitador del indio converso de las misiones, llegando en algunos casos a producirse en sus numerosos talleres, bajo la supervisión de los HH. Coadjutores, bellos muebles, soberbios altares, portales y confesionarios, en los que muchas veces la sobriedad y el acierto con que se combinan sus unidades decorativas, dan una impresión de arte y buen gusto instintivos, que no consiguieron expresar otros muebles similares de producción extranjera con un decorado más rebuscado, y herramientas más perfeccionadas.
"La orden de los PP. franciscanos contribuyó también a la difusión de la enseñanza de las artes manuales, produciendo en sus talleres numerosas obras de mérito, no sólo en pintura y tallas sino igualmente en muebles y orfebrería, que son hoy el orgullo de las iglesias y de los coleccionistas que las poseen".
LA EVOLUCIÓN DEL BARROCO ARCAICO
Desde mediado del siglo XVII se nota la influencia portuguesa y el uso del torno. Tallas de flor central y ondas laterales.
Tipos de muebles: sillas, sillones, sillas enanas, escaños, arcones, alacenas, armarios, camas, catres, nichos, mesas y otros.
ARMARIO ÁREA JESUÍTICA
Siglo XVIII
Centro de Artes Visuales / Museo del Barro
Fundación “Carlos Colombino”
CONFESIONARIO
Siglo XVIII
Museo “Monseñor Juan S. Bogarín”
SIGLO XVIII
Se inicia el periodo alto barroco misionero, dentro del cual tanto jesuitas como franciscanos lograrán obras maestras: San Ignacio Guazú, Yaguarón.
Florecimiento del barroco guaraní. Estructuras españolas con ornamentación rococó, talla mestiza de motivos regionales (pasionaria, serpiente, yaguá), enconchados de rio; muebles rústicos con policromía y dorado. Nuevos modelos. Tapizados.
El surgimiento de estas manifestaciones artísticas y de otras, independientes de las misioneras, se debe a la apertura de varios puertos al comercio y la navegación, la introducción de la moneda metálica, el nacimiento de una burguesía comercial, etc.
En 1767, con la expulsión de los jesuitas, comienza la decadencia y la dispersión de las obras de arte, si bien muchos maestros carpinteros continuaron trabajando en talleres particulares.
ARCÓN
Siglo XVI
Centro de Artes Visuales / Museo del Barro
Fundación “Carlos Colombino”
MAESTROS Y TALLERES DE OFICIOS ARTESANALES
CLASIFICACIÓN DE LOS TALLERES:
A) PUEBLERINOS: FRANCISCANOS
B) MISIONEROS: JESUITAS
CLASIFICACIÓN DE ARTESANOS:
A) ARTESANOS CALIFICADOS
B) ARTESANOS MENORES
"En cada taller había un maestro, especializado en su respectivo oficio. Se elegían para cada ramo los indios jóvenes que más aptitudes y buena voluntad demostraban para él, lo que se hacía no sólo con el consentimiento de sus padres, sino también con gran contento de los mismos, pues el profesar algún oficio no era tenido por ellos como' una carga pesada, ni mucho menos como un deshonor. Cuando el indio se había distinguido por su capacidad y contracción al trabajo, como premio se le ponía al frente de una sección del taller, en cuyo caso se le daba el título de alcalde. Había así, por ejemplo, alcalde de carpinteros, de tallistas, de muebleros, de plateros, de torneros, de rosarieros, de tejedores, etc. A los indios aprendices se les llamaba comensales".
ESCRITORIO
Principio Siglo XIX
Perteneció a Fulgencio Yegros
Museo “Monseñor Juan S. Bogarín”
MUEBLE ARMARIO
Siglo XVIII
Centro de Artes Visuales / Museo del Barro
Fundación “Carlos Colombino”
SILLÓN CAPITULAR FRANCISCANO
Siglo XVIII
Museo “Casa de la Independencia”
"Entre los Hermanos jesuitas coadjutores que más se distinguieron como maestros carpinteros y ebanistas, aparte de los ya citados anteriormente, cabe mencionar todavía a los siguientes: Juan Wolff, Carlos Franck, Jorge Rait, José Brassanelli y Otto Wilgen, que actuaron en los primeros tiempos de las misiones jesuíticas”.
Para las escritoras Sara Bomchil y Virginia Carreño, "los descubridores y conquistadores habían venido con artesanos. Era impensable entonces viajar sin llevar a bordo carpinteros capaces de rehacer una nave, y debió haberlo de origen moro. Es significativo que la primera exportación fuera de 'cordobanes' o sea de cueros de venado trabajados a la manera de Córdoba, capital árabe".
A todo lo anterior agrega Furlong, Guillermo S.)::
"Ya con Pedro de Mendoza llegaron en 1536 el esperado Galeano de Neyra, natural de Valencia de Alcántara, los toneleros Francisco Tisón, natural de Bretaña, y Rodrigo de los Ríos, también bretón, el platero Juan Velázquez, natural de Utrera, el ballestero Diego González Pintos, natural de Morón, el herrero y aun maestro de herrería Antonio Portugués, el guadamecillero Francisco Pérez, natural de Córdoba, el herrero Rui-Charte o Richard Limón o Lemon, inglés, el aserrador Juan Azuaga, natural de Azuaga; el calafatero maese Antonio, valenciano, otro herrero portugués, llamado Juan Portugués, y otra Juan Portugués que era sillero, y maese Miguel, también herrero, y el carpintero de ribera, Simón Luis; también portugués.
"Había venido primeramente con Gaboto y regresó al Río de la Plata con Mendoza, el 'lapidario' o can Cero, Hans Bunberke o Brunbeker, natural de Maguncia. Actuó en Santic Spiritus, Asunción y Corpus Christi, aunque de seguro, poco 0 nada, pudo hacer en el ramo de su especialidad, la cantería. Según Lafuente Machaín, debió Bunberke de fallecer con anterioridad de 1543.
"El maese Antonio Portugués, herrero de oficio, era natural de Leyte, y se hallaba en Asunción en 1564. Es probable que haya sido él, a una con el maese Miguel, Juan Portugués y con Richard Lemon, quien hizo los primeros cerrojos, grillos; alcayatas y rejas que, sobre la base de hierro viejo, se trabajaron en el país. Ese inglés, a quien los documentos llaman Ruy Chorte Limos, era natural de Plymouth y vivía en Asunción en 1569:
"Estos primeros herreros, además de valerse de hierro viejo, contaron con hierro sin usar, ya que, a Io menos desde 1549, se importó ese mineral en barras o Lingotes: Bien lo indica la real cédula de 12 de marzo de ese año, autorizando al adelantado Diego de Sanabria, Gobernador del Río de la Plata, para que llevara una parte del hierro y acero a que se había obligado a embarcar su padre, Juan de Sanabria, con el compromiso de llevar el resto, si fuera necesario, en el otro viaje.
ARCÓN
Siglo XVIII
Colección Beatriz Chase
SILLÓN FRANCISCANO
Principio del Siglo XIX
Colección Beatriz Chase
"No eran pocos los artesanos que llegaron a nuestra playa en 1536, pero, aún así, eran pocos para todas las necesidades de aquel momento crucial. No en vano, Fray Bernardo Armenta escribía, pocos años después, en 1539 ó 1540, a la Corte hispana y manifestaba que 'sería necesario que nos enviasen algunos labradores y artesanos de toda clase, más útil que la de los soldados..."
Según el historiador y periodista paraguayo Luis Verón, "Desde luego que aquellos rudos conquistadores habrán sido apenas unos forzosos carpinteros. Pero con el tiempo vinieron otros más avanzados, como aquel Pedro Ramírez, cuyo nombre ha registrado la historia y a cuyo, servicio se puso el indio Felipe, ávido de aprender el oficio. Fue, pues, Felipe el primer carpintero indígena de nuestro medio.
"A Pedro Ramírez le acompañaron en la tarea de trabajar la madera otros profesionales en aquellos momentos iniciales de la historia rioplatense: Pascual Ramírez, Pedro Cimbrón y Pedro Bravo. Luego, con la presencia jesuítica en la región, llegaron otros duchos en el oficio como los maestros Mateo Domínguez, Domingo Ferreyra y Pedro de la Compañía, como dice un antiguo documento. La historia también registró los nombres de otros primitivos carpinteros, como Hernando de la Cueva, Antonio du la Rocha y un tal Fuentes.
"Posteriormente aparecieron en la región muy buenos oficiales portugueses, como un tal Alfonso Caravallo, entre otros. No pocos fueron los indígenas que prontamente aprendieron el oficio, como el ya mencionado indio Felipe, o el peruano Juan Quisma, afincado en Tucumán, quien además de carpintero era ensamblador y tallista”.
"La capacidad de los aborígenes de aprender la carpintería era tal en las reducciones que, según Guillermo Furlong, "ya a fines del siglo XVIII no había pueblo que no contara con sus talleres de carpintería y- herrería y con buenos maestros en ambas facultades".
CÓMODA
Principios del Siglo XIX
Museo “Monseñor Juan S. Bogarín”
ARCÓN
Siglo XVIII
Colección Oscar Centurión.
En el Paraguay, especialmente en las reducciones guaraníticas, fueron muchos los "adoctrinados" que aprendieron el oficio, por medio de sus maestros doctrineros. Es tanta la destreza de algunos, que un cronista, el padre José Cardiel, señaló: "Hay algunos que parece nacieron maestros de todos los oficios".
De acuerdo con el Arquitecto Gutiérrez "la capacidad del indio se centraba en las posibilidades de una imitación no creativa, donde eran capases de una minuciosidad y detalles que es hoy elocuente en múltiples obras. Nos cuesta sin embargo aceptar la hipótesis, no sólo porque significa una visión castrados de las potencialidades reales de os guaraníes sino porque en muchos campos han dado numerosas muestras de creatividad "Por otra parte no todos los pueblos tenían organizados talleres de los mismos oficios y era común que se dispusiese el pase de artesanos entre pueblos aún con el pago de derechos. También en numerosas oportunidades los artesanos son requeridos para obras públicas por cuenta del Rey...
"La organización de los talleres artesanales era más avanzado que la de los oficios, en las mismas ciudades de españoles, pues por un lado se regula el número de maestros y artesanos para cada oficio y se designaba un Alcalde o Superintendente por taller a cuyo cuidado se encontraban las máquinas y herramientas y regulaba la producción según la demanda, controlando el abastecimiento de la materia prima y certificando la calidad del producto".
ALTAR DOMÉSTICO - SILLETA (MUEBLE POPULAR)
Siglo XVIII
Centro de Artes Visuales / Museo del Barro
Fundación “Carlos Colombino”
MATERIALES UTILIZADOS EN LA
CONSTRUCCIÓN ''DE MUEBLES COLONIALES
• Maderas básicas: cedro, urundey (jacarandá), petereby.
• Otras, para estructuras: guayabón, timbó, tataré.
• Duras, de construcción: quebracho, lapacho.
• Revestimientos: palo santo, palo rosa, incienso, guayacán.
• Tintes vegetales: urucú(rojo), ilex paraguarienses o yerba mate (verde), ñandypá (azul), yrybú retymá (negro).
Fuente:
CATÁLOGO DEL MUSEO DEL MUEBLE PARAGUAYO
Secretario: RICARDO FLORES
Curador: CARLOS COLOMBINO
Tel. 0291 432 833
Correo: mueblecolombino@gmail.com
Dirección: Palma c/ Estación Terrena
Cocué Guazú, Areguá
Departamento Central, Paraguay
FUNDACIÓN CARLOS COLOMBINO LAILLA
Presidente : OSVALDO SALERNO
Vice Presidente : RODOLFO OVIEDO
CENTRO DE ARTES VISUALES / MUSEO DEL BARRO
Directores : OSVALDO SALERNO / LÍA COLOMBINO
Asesor : TICIO ESCOBAR