Corría el año 1968 y el genio creador de la guarania, José Asunción Flores, exiliado de su Paraguay natal, se encontraba en ese momento recorriendo las calles de París.
Un video capta a Flores distendido, divirtiéndose a pleno, jugando con un niño a la pelota. En honor al aniversario de su nacimiento y al Día de la Guarania, compartimos imágenes inéditas del archivo del periodista Antonio V. Pecci.
Quienes tuvieron el placer y el honor de conocer al maestro Flores lo recuerdan como una persona jovial, con cuerpo de hombre pero con el alma de niño.
Es sabido que José Asunción Flores fue al exilio por razones políticas, siendo militante del perseguido Partido Comunista Paraguayo en tiempos de la Guerra Fría, cuando el gobierno de Estados Unidos apoyaba a las dictaduras militares del Cono Sur.
El año 1968, lo sorprendió recorriendo las calles y los bulevares parisinos, ese mismo año se gestó el célebre Mayo Francés: una ola de protestas y movilizaciones ciudadanas en contra del aquel entonces presidente Charles de Gaulle. Un hecho sin precedentes, que significó el soplo de nuevos vientos en occidente.
En el video se puede apreciar a Flores radiante, con una sonrisa en la cara, jugando como un niño. Esto era parte de la personalidad del creador de la guarania, quien recorrió el mundo llevando siempre a su amado Paraguay en la memoria y la nostalgia.
En el material se observan imágenes inéditas que muestran al otro Flores, en una faceta vista solo por amigos y allegados al músico.
Flores, en persona
El periodista Antonio V. Pecci recordó a quien llegara a conocer en persona en el año 1966 en la ciudad de Buenos Aires: "Flores era una persona que irradiaba energía positiva y que, a pesar de estar lejos de su tierra, no perdió en ningún momento la forma de hablar y las costumbres paraguayas. Comenzaba las charlas en español y las terminaba en guaraní, además le gustaba tomar cocido", dijo el periodista.
Pecci, además señaló que Flores era una persona que no se privaba de gustos, es decir; era amante de la comida y la sobremesa: "Era de muy buen comer, amante de las milanesas y de la comida típica paraguaya, como el soyo. Pero además era asiduo a las caminatas, incluso mucho tiempo antes de que los médicos empiecen a recomendar a sus pacientes esta práctica. En Buenos Aires se lo podía ver recorriendo la calle Corrientes, Callao, la Avenida 9 de Julio".
El autor de "Tributo a Flores" y coordinador del suplemento cultural "Correo Semanal" del Diario Última Hora, comentó a ULTIMAHORA.COM que gracias a sus largas caminatas Flores, observador nato, compuso la laureada guarania "Mburicao", en honor al cauce asunceno: "Flores iba a dar serenatas a una mujer al Barrio Villa Aurelia, al regresar, cansado; decidió dormir a la vera del arroyo, utilizando su guitarra como almohada".
Día de la guarania
El Día de la Guarania se recuerda el 27 de agosto en honor a la fecha de cumpleaños de José Asunción Flores, su creador. Esto se originó a raíz de la propuesta de una asociación de paraguayos en Argentina, denominada Guaraniaha.
Así, a partir de mayo del 2011, el 27 de agosto de cada año será recordado como Día de la Guarania, además; este género musical fue declarado patrimonio cultural del Paraguay por el Congreso Nacional el mismo año en el marco de los festejos por el Bicentenario de la Independencia de Paraguay.
¿Por qué el nombre Guarania ?
Antonio Pecci explicó que Flores pensó en un nombre apropiado para el entonces nuevo género y se inspiró en unos versos del poeta misionero Guillermo Molinas Rolón, específicamente en la obra El canto de la raza, que hablaba de la guarania como La tierra prometida.
"La guarania refleja el lado nostálgico de los paraguayos, que anteriormente no estaba reflejado en la música, podría decirse que su esencia es testimonial ya que toca temas no antes abordados como el dolor del campesinado y el trabajo infantil (en el caso de "Mita'i" de Jorge Gómez Rodas).
A José Asunción Flores tenía una gran preocupación por los problemas sociales de nuestro país, solo basta con escuchar canciones como Obrerito o Ñemity para darse cuenta de esto", señaló Pecci, quien finalmente recordó que uno de los últimos deseos de Flores era viajar a Cerro Corá para escribir en ese lugar un poema sinfónico del asesinato del Mariscal Francisco Solano López en la guerra de la Triple Alianza (1864 - 1870).
Fuente: UltimaHora - Paraguay (Online)
27/Agosto/2012
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