FALLECIÓ LA POETISA PARAGUAYA GLADYS CARMAGNOLA - JUEVES 9 DE JULIO DE 2015
La poeta y docente Gladys Carmagnola, cofundadora de la Sociedad de Escritores del Paraguay, falleció este jueves a los 76 años de edad.
La poeta falleció este jueves en horas del mediodía, según confirmó su hermana Aide Carmagnola en contacto con el diario Última Hora. Su deceso se produjo a causa de problemas cardíacos y diabéticos. Con anterioridad había sido sometida a una operación del corazón, lo que la dejó en estado delicado.
Su entierro está previsto para este viernes en el Cementerio del Este y su velatorio será llevado a cabo en el salón del Portal La Piedad (Sacramento 936 casi Walt Disney).
La escritora era miembro de la Academia Paraguaya de la Lengua Española. Fue integrante de la Sociedad de Escritores del Paraguay (SEP), del PEN Club del Paraguay y de Escritoras Paraguayas Asociadas (EPA).
Publicó varios libros de poesía y poemarios conmemorativos (1979, 1982 y 1988), parte de su producción fue incluida en antologías y publicaciones literarias locales e internacionales.
Entre sus primeros libros de poesía infantil figuran: Ojitos negros (1965), Navidad (1966), Piolín (1979 y 1985) y Lunas de harina (1999). Sus poemarios dirigidos al público mayor son: Lazo esencial (1982), A la intemperie (1984) e Igual que en las capueras (1989), además de ser distinguida con el Premio de Poesía José María Heredia, de la Asociación de Críticos de Arte de Miami, EEUU (1985).
Con Un sorbo de agua fresca (1995) ganó en 1996 el Premio Municipal de Literatura, compartido ese mismo año con Jacobo Rauskin. Además de su prolífica producción poética, Gladys Carmagnola es editora de las colecciones de poesía infantil Corcel y Piolín.
El año pasado, Carmagnola recibió el reconocimiento a los Maestros del Arte junto con Ramón del Río (teatro), Lorenzo Álvarez (música), Wal Mayans (danza) y Julia Isidrez (ceramista).
A continuación, un poema de Gladys extraído del poemario A la intemperie (1984):
Nostalgia
¿Por qué este aroma que me trae el viento
me inunda de nostalgia, de recuerdos?
(Pétalo azul,
agua,
ternura,
cielo... )
Aquel amor
¿fue amor?
¿ha sido todo cierto?
Este aroma que vive desde entonces
¿es auténtico?
Fuente: Edición digital del diario ÚLTIMA HORA – www.ultimahora.com
MUERE LA POETISA GLADYS CARMAGNOLA - 09 DE JULIO DE 2015
La reconocida escritora, co-fundadora de la Sociedad de Escritores del Paraguay fue distinguida el año pasado con el reconocimiento Maestros del Arte.
Este jueves dejó de existir a los 76 años la escritora y poetisa paraguaya Gladys Carmagnola, co-fundadora de la Sociedad de Escritores del Paraguay y una destacada exponente de la literatura paraguaya en la actualidad.
Nacida en Guarambaré el 2 de enero de 1939, Carmagnola comenzó a publicar poemas infantiles con su obra de 1965 Ojitos negros, aunque su bibliografía se compone también de obras ajenas al género infantil a partir de la década de 1980. Su poemario de 1992 Depositaria infiel fue premiado por el Instituto Cultural Paraguayo-Alemán.
Recibió galardones por sus obras en Argentina y Estados Unidos, mientras que en Paraguay fue galardonada con el Premio Municipal de Literatura de Asunción en 1996, y en 2014 recibió la distinción Maestros del Arte, de parte del Congreso Nacional.
Carmagnola fue contemporánea de algunos de los principales autores de la poesía paraguaya, incluyendo a Josefina Plá.
Fuente: Edición digital del diario ABC COLOR – www.abc.com.py
GLADYS CARMAGNOLA, POETISA DE LOS NIÑOS - 10 DE JULIO DE 2015 | ESCRITORA FALLECIÓ AYER A LA TARDE
Ayer a la siesta falleció la poetisa Gladys Carmagnola, de destacada trayectoria en la literatura infantil, aunque también ha escrito varios libros para el público adulto. Carmagnola, nacida en Guarambaré en 1939, ha obtenido varios premios a lo largo de su trayectoria literaria.
“Hay en el libro demasiada ternura, si no conociéramos a Gladys y no supiéramos que ella es pura ternura; que esa dulzura es su acento y de sus imágenes no es sacarina de recetario, sino auténtica miel de las entretelas del corazón”. Así la había descripto en una oportunidad Josefina Plá a Gladys Carmagnola.
La poetisa tomaba muy en serio escribir para los niños. “Es un gran compromiso y mi singular orgullo”, había señalado.
Hasta María Elena Walsh había llegado la obra de Carmagnola, quien había elogiado la belleza y la claridad literaria de su obra “Piolín”, lanzado en 1979.
Obtuvo el Premio Municipal de Literatura en 1996, Mención de Honor en el Premio Nacional de Literatura en 1995, y el Premio (único) de Poesía del Instituto Cultural Paraguayo-Alemán por su obra “Depositaria infiel”, en 1992. También fue premiada con la “Fiambrera de Plata” del Ateneo Casablanca de Córdoba, España, en 1989.
Carmagnola empezó a publicar sus libros en los años sesenta. “Ojos negros” se denominaba su primer libro, aparecido en 1965. José Luis Appleyard opinaba que la poesía de la entonces joven autora “nace bajo el signo de lo auténtico, de aquello que sale directamente del corazón”. También en su poesía adulta conservaba siempre su espontaneidad y su frescura, según señalaba el libro “Historia de la literatura paraguaya”, de Hugo Rodríguez Alcalá.
Algunas de sus obras son “Lazo esencial”, 1982; “A la intemperie”, 1984; “Igual que en las capueras”, 1989; “Depositaria infiel”, 1992; “Un sorbo de agua fresca”, 1995; “Territorio esmeralda”, 1997, y “Un verdadero hogar”, 1998. En 2012 lanzó “Travesía”, en el que recreaba recuerdos de la infancia, vividos junto con su hermano Carlos, cuando iniciaban su amor por la literatura.
Los restos de Gladys Carmognola son velados en Portal La Piedad (Sacramento c/ Walt Disney).
Fuente: Edición digital del diario ABC COLOR – www.abc.com.py
CUESTIÓN DE GEOGRAFÍA
Lo repetía mi hermano:
El amor es cuestión de mera y simple geografía.
Y debo reconocer que estas palabras
en apariencia ridículas
son
la verdad más legítima.
El ser humano que somos
gesticula, sueña, grita
y depende de los pasos
más o menos que camina,
de una muralla, un portón,
un arroyo, una colina.
Nuestro mundo, aunque parezca quietecito,
gira y gira.
El hombre de ciencia busca,
a los abismos del cosmos se apeligra;
se acoda sobre el brocal del mundo
y allí investiga.
Lo que ignora, se lo calla,
y lo demás, lo publica.
Se extasía ante la imponente
majestuosa maravilla
que ama porque la conoce,
y más porque la imagina.
¿Y a amar solo cuanto ponen a tu vista
sin protestar te resignas?
Pues se diría que no
a juzgar por la frecuencia
con que tomas y retomas
y escarbas y recuperas tu voz de la hojarasca a la
poesía:
dar y darse, y recibir amor.
Sí. Claro:
como decía mi hermano,
cuestión de mera y simple geografía.
(de “Un verdadero hogar”)
Fuente: 25 AÑOS DE LA SOCIEDAD DE ESCRITORES DEL PARAGUAY
Editorial SERVILIBRO. Asunción – Paraguay, Agosto, 2013 (180 páginas)
GLADYS CARMAGNOLA : Poeta y docente paraguaya. Nació en Guarambaré, el 2 de enero de 1939; hija de Ramona Herrera Udrizar y Carlos Carmagnola.
-. Se casó con Julio Medina, abogado de profesión. Tuvo una hija: Cecilia Medina Carmagnola.
-. Es una de las escritoras más conocidas del Paraguay, su trabajo literario está dedicada a un público muy amplio, comprendiendo obras tanto para niñas/os como para adolescentes y adultos.
-. Sus estudios primarios los inicios en su ciudad natal, pero al trasladarse a la capital con su familia, por razones de fuerza mayor; continuó su formación en Asunción.
-. Ya en la adolescencia ha manifestado una inclinación natural hacia la poesía.
-. Desde muy joven se dedicó a la docencia, desarrollando en forma simultánea su vocación poética.
-. Su aporte a la literatura y educación paraguaya no se limita solo a la creación, pues es cofundadora y miembro de la Sociedad de Escritores del Paraguay. También tuvo participación en la fundación de Escritoras Paraguayas Asociadas y del Pen Club del Paraguay.
-. Forma parte de una generación de mujeres paraguayas que, a inicios de la década de 1960, da a conocer su producción literaria, ocupando un espacio muy importante en la literatura paraguaya.
-. Sus primeros pasos en la producción poética, estaban dirigidos hacia el público infantil. De esa época datan sus primeras publicaciones de poesías para niños. Su primera obra "Ojitos negros", fue lanzada en abril de 1965.
-. A más de sus tantos libros publicados, varios de sus poemas han sido incluidos en antologías y publicaciones literarias, tanto de su país como de otras naciones extranjeras.
-. Gladys es contemporánea de un prodigioso grupo de escritores. Entre ellos están: Eloy Fariña Núñez, Hérib Campos Cervera, Josefina Plá, Óscar Ferreiro, Elvio Romero, José Luis Appleyard, Ramiro Domínguez, José María Gómez Sanjurjo, Rubén Bareiro Saguier, Carlos Villagra Marsal, Jacobo Rauskin, Miguel Ángel Fernández, Rosario Cáceres Huispe, Emilio Pérez Chaves, Susy Delgado y Mario Casartelli, entre otros.
OBRAS
Su primera publicación data de 1965; a partir de allí, se ha dedicado enteramente a la producción de obras poéticas, completando en total 20 títulos de su autoría.
AÑO/ OBRAS DE POESÍA INFANTIL
1965 Ojitos negros. 1966 Navidad.
1979 Piolín. Obra infantil que en su primera edición fue presentada por Josefina Plá.
2003 Lunas de harina./ Paseo -¡Al zoo -¡Lógico! (Paseo al zoológico)
2008 Crónicas de Cualquierparte.
AÑO/ OBRAS DE POESÍAS PARA ADULTOS
1982 Lazo esencial.
1984 A la intemperie. Obra en la que reúne algunos de sus primeros poemas de inicios de la década de los 60'.
1989 Igual que en las capueras. Distinguida con el Premio de Poesía "José María Heredia" de la Asociación de Críticos de Arte de Miami, Estados Unidos.
1992 Depositaria infiel. Poemario ganador del Premio (único) de Poesía del Instituto Cultural Paraguayo-Alemán
1997 Territorio esmeralda.
2002 Río blanco y antiguo.
AÑO/ LIBROS INÉDITOS
1986 Para reconocernos como hermanos. Obra finalista en el concurso poético del Ateneo Casablanca de Córdoba, España.
1990 Ceniza y llamarada. Obra que obtuvo el accésit en el Concurso Quinto Centenario convocado por la Embajada de España en Paraguay.
PREMIOS Y DISTINCIONES
A lo largo de su carrera ha sido galardonada con numerosos premios y homenajes nacionales e internacionales.
AÑO/ PREMIOS RECIBIDOS
1981 Primer Premio de Poesía "Amigos del Arte" (Asunción).
1985 Premio de Poesía "José María Heredia", de la Asociación de Críticos de Arte de Miami, EE.UU. por su obra "Igual que en las capueras". 1989 Premio la "Fiambrera de Plata", del Ateneo de Cultura Popular de Córdoba (España).
1992 Premio (único) de Poesía del Instituto Cultural Paraguayo-Alemán por su obra "Depositaria infiel".
1994 Plaqueta y Homenaje Público del Festival del Lago Ypacaraí.
1995 Mención de honor del Premio Nacional de Literatura.
1996 Premio Municipal de Literatura.
Sobre las obras infantiles de Gladys Carmagnola, opinaba JOSEFINA PLÁ: "Hay en el libro demasiada ternura, si no conociéramos a Gladys y no supiéramos que ella es pura ternura; que esa dulzura es su acento y de sus imágenes no es sacarina de recetario sino auténtica miel de las entretelas del corazón".
Sus poesías infantiles tienen aquel sabor dulce y travieso que invita a quien los lee a sacar de adentro el alma de niño que todos tenemos dentro. Producen deleite y nos transporta a los tiempos de los ricos helados a la siesta y los juegos incansables con los amigos del bando.
También se ha hecho eco de su obra "Piolín", la autora argentina María Elena Walsh, quien lo definió como "el transparente Piolín", por su belleza y claridad literaria.
A partir de 1980, aflora una etapa de madurez como escritora, evolucionando su producción hacia un estilo vanguardista. Surgen en esta etapa, poemas que denotan una época íntimamente reflexiva de la poetisa y varios poemas de carácter amatorio.
Sus poemas para adultos es un abanico de ideas y sentimientos hacia la injusticia, hacia su amor a la poesía; la nostalgia hacia su ciudad natal y su infancia pincelada por bellos y crueles momentos, los que se esbozan en su poesía "La Casa Quemada". En "Territorio Esmeralda" y "Crónicas de Cualquierparte", específicamente, expresa sus momentos vividos en Guarambaré.
Fuente : POETAS Y POETISAS DEL“TERRITORIO ESMERALDA”GUARAMBARÉ. Autora:DELIA PICAGUÁ BORDÓN. Asunción-Paraguay, noviembre 2009.
CARMAGNOLA, GLADYS : Nació en 1939 en Guarambaré, su “Territorio esmeralda”.
A su primer poemario: OJITOS NEGROS, aparecido el 13 de abril de 1965, ha seguido más de una veintena: NAVIDAD (opúsculo), 1966; PIOLÍN (para niños), 1979; LAZO ESENCIAL, 1982; A LA INTEMPERIE, 1ª Ed., 1984 y 2ª Ed. 1998; IGUAL QUE EN LAS CAPUERAS (Premio José María de Heredia de la Asociación de Críticos y Comentaristas de Arte de Miami, 85); DEPOSITARIA INFIEL, 1992; UN SORBO DE AGUA FRESCA (Premio Municipal de Literatura, 1996); RÍO BLANCO Y ANTIGUO; TERRITORIO ESMERALDA, 1997; UN VERDADERO HOGAR, 1998; BANDERAS Y SEÑALES, 1999; POEMA DE LA CELEBRACIÓN; UNA ROSA DE HIERRO… y para niños: LUNAS DE HARINA, 1999; PASEO ZOOLÓGICO…
Es docente y editora responsable de las Colecciones CORCEL de poesía, y PIOLÍN, de literatura para niños. Su obra poética de más de cuatro décadas, ha merecido numerosas distinciones del país y del exterior.-
(Fuente "REVISTA DEL PEN CLUB DEL PARAGUAY/ POETAS-ENSAYISTAS-NARRADORES”/ IV ÉPOCA-Nº 15 - Arandurã Editorial, Asunción-Paraguay, Mayo 2008 ).
GLADYS CARMAGNOLA DE MEDINA (Guarambaré, 1939). Cuando hace ya más de treinta años apareció Ojitos negros, un pequeño libro de poemas infantiles, venía la obra avalada por comentarios de José Luis Appleyard en las solapas y de doña Josefina Plá en el prólogo. Era la obra primeriza de Gladys Carmagnola, que auspiciosamente irrumpía en el difícil arte de la poesía infantil, "la menos infantil de las poesías" aclaraba su prologuista.
Appleyard, por su parte, opinaba que la poesía de la joven autora "nace bajo el signo de lo auténtico, de aquello que sale directamente del corazón...".
Pasaron los años, mucho ha escrito entre tanto Gladys Carmagnola y hasta en la "poesía adulta" que nos entregó en más de doce libros posteriores, ha conservado siempre su espontaneidad, su frescura, que son rasgos que caracterizan toda su obra.
En la década del ochenta, Josefina Plá calificaba a Gladys Carmagnola de la siguiente manera: "Profundamente mujer en cuanto esta palabra supone de ternura, de sutilezas del sentimiento, de generosidad, y sobre todo, capacidad de dación". En otro párrafo de su estudio señalaba Josefina Plá: "Se expresa con sencillez, que no le impide alcanzar profundidad y desenvuelta gracia". Y así es ella misma, en la poesía y en la vida real: comunicativa, sincera y espontánea. Nunca ha intentado la experimentación artificiosa, el surrealismo hermético; siempre ha cantado a las cosas sencillas de la vida, a los placeres cotidianos, con los que sus lectores se sienten identificados.
El exigente crítico Hugo Rodríguez - Alcalá reseñando el libro A la interperie dice: "¿A quién se parece la lírica de Gladys Carmagnola?. Por su espontaneidad, por su delicadeza, por su sentimentalidad exquisita nos recuerda - sin que este recuerdo implique en su menosprecio el aserto de una imitación - nos recuerda la lírica de Gustavo Adolfo Bécquer".
Gladys Carmagnola de Medina desempeña un alto cargo en la secretaría del Rectorado de la Universidad Católica de Asunción y además, dedica gran parte de su tiempo a la Colección del Corcel, que edita poesía.
Sumados a los premios que figuran más abajo, a lado de cada obra, esta poetisa ha obtenido también los siguientes galardones: Primer Premio de Poesía "Amigos del Arte" (1981), Fiambrera de Plata del Ateneo Casablanca, Córdoba, España (1989); Plaqueta del Festival del Lago Ypacaraí (1994); Finalista del Concurso Poético del Ateneo de Córdoba, España (1986) y Mención de Honor en el concurso Quinto Centenario, convocado por la Embajada de España en el Paraguay (1990).
Una muestra de su delicada lírica en esta breve composición titulada Clave:
Si apenas sé de mí
brevísimos fragmentos
y si de ti conozco
mucho menos,
me queda solamente rastrear
mi corazón por dentro
a ver si él sigue dándome la clave
de lo cierto.
D.P.C.
BIBLIOGRAFIA: VOCES FEMENINAS EN LA POESÍA PARAGUAYA - Josefina Plá - Alcándara (1982); POETAS Y PROSISTAS PARAGUAYOS - Hugo Rodríguez-Alcalá - Intercontinental Editora, 1988; POETISAS DEL PARAGUAY - Miguel Ángel Fernández - Renée Ferrer de Arréllaga - Torremozas - Madrid (1992); RESCATANDO LA POESÍA PARAGUAYA (III) - Roland Haladyna - (Diario La Nación 24 de agosto de 1997); BREVE DICCIONARIO DE LA LITERATURA PARAGUAYA - Teresa Méndez - Faith. Editorial El Lector (1996); POESÍA PARAGUAYA DE AYER Y DE HOY - Teresa Méndez - Faith - (1995); FIRST LIGHT - SUSAN SMITH NASH - Universidad de Oklahoma - (1999).
Fuente: HISTORIA DE LA LITERATURA PARAGUAYA. Por HUGO RODRÍGUEZ – ALCALÁ. Universidad de California, RIVERSIDE - Colección Studium-63 - México 1970 © HUGO RODRÍGUEZ – ALCALÁ/ DIRMA PARDO CARUGATTI. Editorial El Lector, Diseño de tapa: Ca´avo-Goiriz. Asunción – Paraguay. 1999 (434 páginas)
CARMAGNOLA, GLADYS : Ciudad de Guarambaré, 1939. Poeta y docente. Miembro de la Sociedad de Escritores y del PEN Club del Paraguay, ha publicado ocho libros de poesía, varios poemarios conmemorativos (1979, 1982 y 1988) y parte de su obra ha sido incluida en diversas antologías y revistas literarias tanto nacionales como extranjeras.-
Aunque se ha dedicado a la creación poética desde muy joven, sus primeros libros publicados fueron considerados de «poesía infantil» y son: “Ojitos negros” (1965), “Navidad” (El Arte, 1966; y CEPUC, 1981) y “Piolín” (Colección Piolín, 1979 y 1985, como suplemento del Diario Noticias).-
Sus poemarios posteriores, «para adultos», son: “Lazo esencial” (1982), “A la intemperie” (1984) -obra donde recoge algunos de sus primeros poemas, de comienzos de la década del 60- (Alcántara Editora, 1984 y Colección del Corcel, 1998), “Igual que en las capueras” (1989) - distinguida con el Premio de Poesía «José María Heredia» de la Asociación de Críticos de Arte de Miami, Estados Unidos (1985)-, “Depositaria infiel” (1992), libro ganador del Premio (único) de Poesía del Instituto Cultural Paraguayo-Alemán (1992) y “Un sorbo de agua fresca” (1995) – Mención de Honor del Premio Nacional de Literatura, 1995; Premio El Lector de Poesía, 1995; y Premio Municipal de Literatura, 1996, compartido ese mismo año con Jacobo Rauskin ( por su libro de poemas Fogata y dormidero de caminantes aparecido en 1994 ).-
Además de los galardones ya mencionados, Gladys Carmagnola ha recibido varias otras distinciones: el Primer Premio de Poesía «Amigos del Arte» (1981), la «Fiambrera de Plata» del Ateneo Casablanca de Córdoba, España (1989) y la Plaqueta y Homenaje Público del Festival del Lago Ypacaraí ( setiembre de 1994 ), para mencionar sólo algunas. Tiene también unos cuantos libros inéditos, entre ellos: “Para reconocernos como hermanos”, obra finalista en el concurso poético del Ateneo Casablanca de Córdoba, España (1986), y “Ceniza y llamarada”, obra que obtuvo el accésit en el Concurso Quinto Centenario convocado por la Embajada de España en Paraguay (1990).-
(Fuente: "BREVE DICCIONARIO DE LA LITERATURA PARAGUAYA"/ 2da. Edición – AUTORA: TERESA MENDEZ-FAITH . Editorial EL LECTOR, Asunción-Paraguay 1998)
CARMAGNOLA, GLADYS : OBRAS DE LA AUTORA:
PARA NIÑOS: “LUNAS DE HARINA” (Colección Piolín, 1999, único libro paraguayo presentado en 1999 en el Salón del Libro Iberoamericano de Gijón, Asturias, España, por el docente y filósofo, jesuita, Dr. Jesús González de Arrieta, SJ, en el mismo acto que se hizo la presentación universal de una obra del Nobel de Literatura Don Miguel Ángel Asturias).-
PARA ADULTOS: “TERRITORIO ESMERALDA” (Intercontinental, 1997) (Premio Pluma de Oro Parker José-Luis Appleyard, 1997, de la Cámara Paraguaya del Libro); “UN VERDADERO HOGAR” (Colección del Corcel, 1998, con poemas escritos entre 1960 y 1967); “BANDERAS Y SEÑALES” (Colección del Corcel, 1999); “RÍO BLANCO Y ANTIGUO” (Intercontinental Editora, 2002); y “UNA ROSA DE HIERRO” (Colección del Corcel, 2005).-
OTROS POEMARIOS DE LA AUTORA:
· OJITOS NEGROS (Poemas a mi sobrino), poemario de amor dedicado a un niño, 1965.
· NAVIDAD (para niños); 1966; 2ª edición, 1980.
· PIOLÍN (para niños), 1979; 2ª edición, como Suplemento del Diario Noticias, 29, enero, 1985.
· LAZO ESENCIAL, 1982; 2ª edición, 1995.
· A LA INTEMPERIE. 1984. Alcándara Editora. 2ª edición, 1999 (Colección del Corcel).
· IGUAL QUE EN LAS CAPUERAS. 1989 (Premio Internacional de Poesía José María Heredia, de la Asociación de Críticos y Comentaristas de Arte de Miami, EE.UU., 1985).
· DEPOSITARÍA INFIEL, 1992 (Premio único de Poesía del Instituto Cultural Paraguayo-Alemán, 1992).
· UN SORBO DE AGUA FRESCA, 1995 (Mención de Honor del Premio Nacional de Literatura, 1995; Premio El Lector de Poesía, 1995; y Premio Municipal de Literatura, 1996, compartido). 2ª ed., 1996.
· TERRITORIO ESMERALDA, 1997. Intercontinental Editora (Premio Pluma de Oro Parker José-Luis Appleyard).
· UN VERDADERO HOGAR, 1998 (Colección del Corcel).
· BANDERAS Y SEÑALES, 1999 (Colección del Corcel).
· JUAN PATO Y SUS LUNAS DE HARINA (Relatos de Cualquierparte), 1999. (Para niños) (Colección Piolín).
Varios otros, conmemorativos, editados en 1965, 1980, 1982 y 1989.
GLADYS CARMAGNOLA (1939) (7-XI-1993 - ABC)
“EN ESTE TERCERMUNDISMO TODO ES MUY DIFÍCIL”
Entrevista por VICTORIO SUÁREZ
( GENERACIÓN DEL 60 - LITERATURA PARAGUAYA )
En la historia de la poesía femenina de nuestro país, tras un repaso cronológico, doña Josefina Plá afirma que en la década comprendida entre 1940/1950 se da un período “transicional” que no oculta una fuerte reacción ante el decadente modernismo. Este hecho generado por los poetas del 40 ejerció marcada influencia en las poetisas de esa época, quienes dividieron sus visiones entre obras de carácter ecológico, libertario e infantil, sin ser éstos los únicos campos de experimentación. Ya en los comienzos de los años sesenta muchas mujeres trabajan con inusitado fervor creativo. Doña Josefina nos indica que las jóvenes voces no pudieron plasmarse en su totalidad debido a la carencia de un punto predecesor-referencial. De todos modos, la década del 60 fortalece un importante lazo comunicativo mediante encuentros y reuniones de grupos literarios. Entonces engrosaron las filas Renée Ferrer, Raquel Chaves y Nilsa Casariego. Notablemente, entre la mitad de los años 60 y mediados del 70 aparecen otros nombres que dan su particularidad a la poesía femenina de nuestro país. Ellas son Noemí Ferrari de Nagy, Lilian Napout y Gladys Carmagnola. Para ir conociendo la poesía paraguaya en un marco de indudable expectativa, hablamos con Gladys Carmagnola, quien en 1965 dio a conocer su primer poemario, con el título de “Ojitos Negros”. Luego aparecen otras publicaciones: “Navidad” (1970), “Piolín” (1979), “Lazo esencial” (1982) y “Depositaria infiel” (1992).
–Gladys, ¿cuál es tu visión respecto a la literatura? ¿Qué podés decir de los años sesenta?
–Hay una cuestión básica a considerar. Nuestro país es de tradición oral. Es posible aseverar que las limitaciones arrancan desde tiempos remotos para influir negativamente en nuestro proceso cultural. La literatura, sin estar ajena al atraso, no ha encontrado una estructura orgánica. Lastimosamente, quienes pudieron romper las adversidades aportaron escasa cuota de interés, y pocos fueron los escritores que se atrevieron a dilucidar la problemática de una literatura sumergida en mares de plagueos y confrontaciones fútiles. Si voy a memorar la década del sesenta, puedo decir sin cortapisas que no existía siquiera la posibilidad de publicar; en esos años, para mí fue todo un deslumbramiento haber asistido a la presentación del libro de José Luis Appleyard, “Entonces era siempre”. Aquella experiencia señaló, sin embargo, un nuevo camino en mi trabajo literario. Conste que aún no tenía conciencia de la realidad que nos absorbía.
–De todos modos, llega tu primer poemario. ¿Eso significa un pacto con la poesía?
–Generalmente, el poeta nunca está en el lugar que le corresponde –vocacionalmente hablando–. En este tercermundismo todo es muy difícil y resulta una utopía pretender vivir de la literatura. La poesía no puede ser fundamental a consecuencia de una realidad que obliga a priorizar otras cosas. A pesar de todo, hay poetas que, desafiando la marginalidad y la pobreza, se dieron con toda integridad a la literatura. No quiero dar nombres por temor a olvidar algunos, pero tampoco puedo ocultar la ejemplar dación de doña Josefina Plá, cuya monumental obra es el signo más elocuente de la perseverancia. Otros, sin ser víctimas de las vicisitudes económicas, han dedicado de manera enriquecedora su tiempo a la literatura, tal el caso de Hugo Rodríguez Alcalá, quien ha formado un taller de cuentos con muy buenos resultados.
–¿Se puede decir que los talleres fueron propulsores de talentos?
–Creo que los talleres pueden producir los más rescatables sucesos si se proponen tomar con seriedad y sistematicidad el trabajo literario. Tomemos como ejemplos a los talleres “Ortiz Guerrero” y el de “Cuento Breve”, que se constituyeron en semilleros de talentos, ya que las universidades –en la carrera de letras– no despertaron el interés de los jóvenes. Estimo que en la citada carrera hay más profesores que alumnos. Es una pena porque se desperdicia la posibilidad de recibir las orientaciones de grandes maestros, como César Alonso de las Heras, Carlos Villagra Marsal, Gonzalo Zubizarreta y Ramiro Domínguez.
–En todo este proceso estamos notando una gran indiferencia hacia la cultura. ¿Es tan acuciante el problema que vive el país?
–Qué se puede esperar en un país donde la tuberculosis –por la precaria alimentación de su población– sigue constituyendo un flagelo. Qué podemos decir cuando palpamos una vida cultural opaca, con grave deficiencia educacional y con docentes mal remunerados que no están suficientemente informados para desarrollar la mente de los estudiantes. Me produce gran incertidumbre la falta de una política cultural coherente. Me preocupan la mediocridad y los niños de la calle, cuyas miradas sin brillo parecen decir que no tienen ninguna esperanza.
–¿Qué puede decir el poeta en esa marea de desesperanza?
–La voz fue dada al hombre y, a través de ella, debe decir la verdad. Muchos poetas dejaron de cantar, pero otros han persistido y son los que están reivindicando la palabra y la dignidad del ser humano.
–Sin embargo, muy pocos producen y asumen la realidad.
–Creo que se está produciendo. Por otra parte, estimo que muchos están cargando sus baterías en esta especialísima época que estamos viviendo tras la prolongada vigencia del stronismo. Hay gente con talento, trabajando sin apoyo, pero acompañando el proceso.
–Muchos poetas se han convertido en empleados del Estado. ¿Se puede calificar eso de pérdida para la literatura?
–Muchos se han brindado últimamente para la política. De todos modos, me hubiera gustado que un Francisco Pérez Maricevich, presidente de la Sociedad de Escritores, pudiera dedicarse exclusivamente a la actividad creativa, para completar, por ejemplo, su diccionario de la literatura o para ejercer la crítica literaria. Un caso que no puedo omitir es el de Adolfo Ferreiro; fue una gran promesa para la literatura de nuestro país, pero su afanoso trabajo político lo ha anulado en un campo que esperaba mucho de él. Hay otros ejemplos, y en la mayoría de los casos la actividad burocrática rompe el encanto del creador.
–Hoy día cada uno hace lo que puede en su pequeño universo.
–Esa es la realidad literaria en un país tan carenciado, donde la tirada de una obra no supera los mil ejemplares.
–Tu nombre suele aparecer como jurado en los concursos poéticos. ¿Qué podés decir al respecto?
–He leído mucha poesía de concursos, y me ha preocupado el poco manejo de la herramienta literaria que es la palabra correctamente escrita. Muchas veces no existe el conocimiento gramatical para acompañar la creación. Dudo de aquellos que escriben sin haber conocido un endecasílabo.
–En tu caso personal, ¿en qué momento escribís?
–Cuando el cansancio no me impide, escribo. Mi actividad no es para trascender.
–¿Se puede hablar con esperanzas respecto a la literatura paraguaya?
–Creo que hay muchas posibilidades. Ya dije: Se están cargando las baterías y estoy segura de que los resultados se sabrán muy pronto. La literatura es un trabajo lento, nadie puede encender la lámpara de Aladino de la noche a la mañana.
–Hace unos días, en una jornada de periodismo, Lisandro Cardozo calificó a algunas figuras de la literatura de “haraganes que no acompañan un proceso de cambio”.
–La afirmación de Lisandro puede ser cierta. El tema es complejo y evidentemente va a molestar a algunos. Prefiero decir que el escritor debe esforzarse y lograr algo digno y desempeñar su oficio, que es escribir. No hay que quedarse con los pocos laureles que dejó la publicación de algún libro.
–La base de tu formación literaria.
–Me apasionaron los libros de aventuras. Julio Verne fue mi ídolo. Rubén Darío, Nervo, Bécker, fueron mis primeros contactos serios con la poesía. No olvido la literatura clásica, Cervantes, Dante; luego vienen Rabindranath Tagor, Federico García Lorca, Borges y Juan Ramón Jiménez.
Fuente: PROCESO DE LA LITERATURA PARAGUAYA - PERFIL HISTÓRICO, BIBLIOGRAFÍA Y ENTREVISTAS A LOS MÁS DESTACADOS ESCRITORES PARAGUAYOS. Por VICTORIO V. SUÁREZ. Edición corregida y aumentada. Asunción, Paraguay. 2011 (654 páginas)