Portal Guaraní - DE OLVIDOS Y CAMBIOS DE POLARIDAD POLÍTICA - Por SERGIO CÁCERES MERCADO

Es temporada de elecciones internas y el nivel de hipocresía, falta de principios y de memoria se acrecienta. Disfrazado de pragmatismo político, las alianzas otrora inconcebibles se suceden entre partidos políticos, movimientos internos y caudillos. Aquellos que alguna vez se declararon la guerra irreconciliable, hoy se abrazan mirando el futuro que está a la vuelta de las urnas. Es cierto que esto es una constante de la política criolla nacional, pero no por eso deja de sorprendernos.

La unión entre el PLRA y el Frente Guasu es un ejemplo de lo que estamos diciendo. A pesar de lo ocurrido en el 2012, cuando los azules le bajaron el pulgar a su aliado Fernando Lugo y lo expulsaron del gobierno, ahora vuelven a estar juntos. Mucho se dijeron en estos cinco años, pero ahora ya no importa, pues se necesitan mutuamente para sumar los votos que venzan a los colorados.

Pero hablando de los colorados, es en dicho partido donde más se nota esa caradurez que estoy describiendo. Un ejemplo claro de esto es Nicanor Duarte Frutos, quien fustiga al Gobierno actual de Cartes en una entrevista concedida a Última Hora este fin de semana. Más allá de que muchas de las críticas que realiza son ciertas, él se olvida de mencionar que sirvió al presidente actual con un silencio ejemplar que recién ahora rompe.

Allá por el 2011, cuando Cartes empezaba su carrera rumbo al Palacio de López, Duarte Frutos fue uno de los primeros en levantar su voz de protesta por tal incursión dentro de la Asociación Nacional Republicana. Sin embargo, esto solo duró unos meses. Repentinamente se volvió su aliado y cuando Honor Colorado logró el objetivo de devolver al coloradismo el Poder Ejecutivo, Nicanor fue designado embajador en Buenos Aires. Ahora que pugna por un lugar en el Parlamento, de repente, vuelve a ser un anticartista furioso. Estos cambios de humor en el ex presidente eran conocidos durante su gobierno y demuestra que sigue vigente con sus oscilaciones políticas.

En aquella época en que Cartes estaba en carrera por ser el candidato para la ANR su rival por el mismo puesto era Javier Zacarías Irún. Si compiláramos las declaraciones de este último contra Cartes, no comprenderíamos cómo es que ahora es su aliado más acérrimo. Pero esta es la norma muchas veces.

Estos cambios de polaridad al estilo Nicanor los veremos desde esta época hasta que todo se decida en el 2018. Luego de esto las aguas se dividirán nuevamente esperando que las internas del 2023 vuelvan a juntarlas en un ciclo que ojalá alguna vez sea roto por la ciudadanía. Mucha gente, es cierto, ya reconoce la hipocresía de estos personajes, pero aún son insuficientes para hacerse sentir en las urnas. Mientras, el ciclo prosigue casi como una ley de la naturaleza.

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