Esta es una preciosa joya musical rescatada por la memoria atenta del maestro Nicolás Caballero. Su autor Lorenzo Leguizamón (Ybytimi, Paraguay, 1920-Asunción, 2005), despliega aquí su sabiduría de compositor para entregar una pieza cargada de ternura y emociones. La interpretación realza esos atributos.