LAS ARTES DE LO POSIBLE

 Por GUSTAVO LATERZA RIVAROLA

Incómodo –más aún por tratarse de una religiosa–, el Vaticano cubrió con el sambenito de la heterodoxia a Margaret Farley, religiosa católica y profesora emérita de la Universidad de Yale, objetando el contenido doctrinal de su libro reciente: “Just Love”.

Tres fueron sus nudos conflictivos: la aprobación de la masturbación femenina, del matrimonio gay y de las segundas nupcias. De la primera afirmó Farley que para las mujeres es un instrumento útil “para descubrir su propia capacidad para el placer”. Del segundo, que es asunto privativo de cada quien. Del tercero, simplemente que nada tienen de malo.

Un par de años antes, la autora de obras sexológicas, Lisa Sweet, publicó en EE.UU. su bestseller Sex Positions 365, un manual fotográfico que ofrece una posición heterosexual para cada día del año. La edición recibió elogios. “La única objeción que le haría a este álbum –me decía una amiga– es que no me sirve para los años bisiestos”.

La cantidad y variedad de posiciones sugeridas por la dulce Lisa asombró a muchos. “¿Cómo 365 posiciones? –reclamó un amigo indio– En nuestro sagrado Vatsyayana kama sutra hay solo ocho posiciones para cada una de las ocho maneras de hacer el amor”. “Tienes razón” –asentí–. “Pero recuerda que tus ancestros se guiaban por un calendario diferente”.

La sexualidad humana resplandece, naturalmente, entre las más oscuras inquietudes de los teólogos de todas las iglesias, como fue y continúan siendo los asuntos relacionados con los placeres humanos, cuyo regimiento, vigilancia y represión constituyeron puntales del poder de los sacerdotes, desde tiempo inmemorial.

“El casado se abstendrá de relaciones conyugales 40 días antes de Navidad y de Pascua –prescribía el Penitencial de Beda el Venerable (hacia el año 700)–. Lo mismo los domingos, los miércoles y los viernes. También, se abstendrá desde el inicio del embarazo de su mujer hasta el 30º día después del nacimiento, si es un varón, o hasta el 40º día, si es una niña”. El católico de hoy tiene la chance de decidir si seguir a Beda el Venerable o a la venerable Sweet.

Esta obsesión teológica con lo sexual, si bien mueve alguno que otro intento serio de actualización, como el de la profesora Farley, más frecuentemente inspira chistes graciosos, como el de un columnista de El Mundo (Xavi Puig) que presenta un supuesto manual lanzado por el Vaticano en el que, como “resultado de la estrecha colaboración entre teólogos y físicos”, se establece la única postura sexual admisible para católicos; que es la posición del misionero (no podía ser de otro modo).

El instructivo de la posición se inspira “en las instrucciones de Ikea” (famosa fábrica de muebles que se arman en la casa). El libro –sigue el columnista– incluye un póster desplegable que describe con exactitud la disposición geométrica de los dos cuerpos a fin de cumplir religiosamente con el insondable misterio de la procreación.

Pero a menudo la fantasía de los chistosos de hoy está largamente precedida por hechos reales pasados. Blas Garay relata: “Movido a curiosidad, refiere un antiguo gobernador de las misiones, por haber observado que en varias horas de la noche, y particularmente hacia la madrugada, tocaban las cajas (los padres misioneros), inquirí el motivo y se me contestó (…) que, celosos los jesuitas del incremento de la población de sus reducciones y poco confiados en la solicitud de los indios, que rendidos por las faenas del día, así que llegaban a sus casas y cenaban, se echaban a dormir, hasta que al alba se levantaban para ir a la iglesia, y de la iglesia a los trabajos, sin curarse, entretanto, de cumplir sus deberes de esposos, excogitaron recordárselos de cuando en cuando durante la noche, despertándolos con el ruido de los tambores” (Cf. N. del Techo. Tomo I. Cap. XXXIX).

Es imposible, a estas alturas, evitar la asociación entre Lisa Sweet y el canciller Bismarck, pues este definió la Política como “arte de lo posible”, y aquella hizo igual con la sexualidad. Podemos escoger entre una de esas artes o ambas (como Monseñor Fernando), pero advertidos de que las dos requieren posturas muy firmes con espinazos bien flexibles.

Fuente: ABC Color (Online)

www.abc.com.py

Sección: OPINIÓN

Domingo, 27 de Enero de 2013

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